Kabalcanty
La imagen (Parte 7ª y última)
Colás estaba escudriñando la pantalla del ordenador y, juraría, que comentaba algo en voz baja. Lo noté porque, aunque llamé a la puerta de su despacho antes de entrar, siguió con su fijación y sólo, tras mis "buenos días", logró prestarme atención dejando escapar un par de palabras ininteligibles de su tácito monólogo. Me miró unos segundos para centrarse y sólo entonces esbozó una ligera sonrisa