Ponte Caldelas denuncia la existencia de "instrucciones internas" en la AXI para "contribuir a engañar a los vecinos"
Por Redacción
El Concello de Ponte Caldelas, gobernado por la coalición formada entre PSdeG-PSOE, BNG y AVP, denuncia la existencia de documentos, dentro del proyecto de las obras de ampliación de la PO-230, entre Serrapio y Vichocuntín (Cerdedo-Cotobade), que destapan la "red clientelar y caciquil de la Consellería de Infraestructuras y algunos alcaldes del PP para reducir las obras de mejora en la red secundaria de carreteras autonómicas a los concellos gobernados por este partido".
En un comunicado, el gobierno caldelano afirma que el proyecto evidencia que la Consellería se dispone a expropiar varias parcelas, forzada por la negativa de un grupo de vecinos, que se negó a firmar delante del exalcalde y actual diputado autonómico, Xosé Balseiros, los "papeliños" de supuestas cesiones de los terrenos afectados a ese concello.
El alcalde, Andrés Díaz, destaca que mientras la Xunta de Galicia se niega a acometer las necesarias obras de la peligrosa y transitada carretera autonómica PO-234, que une Ponte Caldelas con Augasantas, "no tiene inconveniente en expropiar los terrenos que la red caciquil del PP no fue capaz de conseguir en Cerdedo".
Según el gobierno local, la Consellería de Infraestruturas viene alimentando desde 2016 una polémica con el Concello de Ponte Caldelas "tratando de culparlo de no ceder las 99 parcelas afectadas por las obras de la PO-234".
Ponte Caldelas propuso un convenio por el que aportaría 40.000 euros para pagar los terrenos, convirtiéndose de este modo en el primer municipio español en asumir íntegramente las expropiaciones de una carretera autonómica. El proyecto acabó calculando el coste de las expropiaciones en solo 29.812 euros, incluso inferior a los 40.000 euros ofrecidos por el Concello. La Consellería se comprometió a iniciar las obras en 2017, pero, a día de hoy, siguen bloqueadas.