Condenan al Sergas a pagar 170.000 euros tras el infarto cerebral de una bebé en un parto en el Hospital Provincial
Por Redacción
El juzgado de lo contencioso-administrativo nº 2 de Santiago de Compostela estima parcialmente el recurso interpuesto por una madre y obliga al Servizo Galego de Saúde (Sergas) a indemnizar con 170.000 euros a la parte demandante por negligencia durante el parto que tenía lugar el 28 de junio de 2018 en el Hospital Provincial.
La mujer de 39 años, según relata la sentencia, ingresaba en el hospital pontevedrés para finalizar el embarazo que había transcurrido de manera normal. El nacimiento se realiza a través de uso de ventosas y finalmente con cesárea, práctica que, según figura en el escrito judicial, provocó un infarto cerebral del que se han derivado secuelas para la recién nacida, que fue trasladada al Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo a las seis horas de nacer para ser sometida a hipotermia ante las crisis clínicas y eléctricas que mostraba. La pequeña presentaba un scalp, una lesión en el cuero cabelludo y un cefalohematoma.
Durante la vista oral los informes presentados por los peritos entraban en colisión. Entre otros, un especialista en Obstetricia y Ginecología indicaba que la insistencia en el parto vaginal conllevó un encajamiento de la cabeza de la niña en la pelvis materna por lo que en la cesárea hubo de ser impulsada la cabeza a través de la vía vaginal. Explica que la cesárea debió iniciarse antes y que el infarto cerebral de la menor tuvo su origen en un traumatismo obstétrico producido tanto por el inadecuado uso de las ventosas como por el empuje para desencajar la cabeza de la pelvis de la madre.
Por su parte, Eloy Moral Santamaría, jefe del Servicio de Ginecología y Obstetricia del Complexo Hospitalario Universitario de Pontevedra, que actuó como testigo-perito durante la vista, defendió "sin ningún género de duda la actuación de los médicos en sus servicios, si bien no estuvo presente en los hechos", según indica la sentencia.
La jueza entiende que las partes codemandadas, el Sergas y una compañía aseguradora, no presentaron explicación factible alguna o prueba consistente de buena praxis durante la intervención, además de entrar en "claras contradicciones" sobre las tracciones con ventosa y el tiempo en que se empleó.
Por este motivo, el tribunal considera que las graves lesiones y secuelas de la bebé fueron consecuencia de una hipoxia intraútero y un traumatismo ejercido sobre la cabeza del feto tras un parto con instrumentado fallido y una cesárea dificultosa.
La indemnización establecida en la resolución se reparte en 140.000 euros para la menor; 20.000 euros para la madre y 10.000 para el padre, más los intereses desde que se efectuó la reclamación.
Cabe recurso de apelación a esta sentencia.