Un libro para tomar conciencia de la violencia de género a través de los sentimientos de una víctima
Por Natalia Puga & Mónica Patxot
La violencia de género es una problemática que toca la fibra sensible de Milagros Domínguez García (Redondela, 1968). Es una persona muy activa en la Federación Pola Igualdade da Provincia Pontevedra (Femupo), participa en actividades de concienciación y sensibilización sobre esta problemática organizadas por distintas entidades y en las columnas que publica periódicamente en PontevedraViva desde 2018 resulta un tema recurrente. Su conciencia es profunda y tiene interiorizada la necesidad de trabajar desde la educación para erradicarla. Ahora, toda esa implicación ha adoptado el formato de novela.
Proteger es mi deber, el honor mi divisa es el título de esta obra, su primera novela, que resultó finalista en el III Concurso Literario Asociación Pro Guardia Civil (APROGC), convocado por esta entidad y editado por Eolas Ediciones. Se trata de una novela corta que aborda la violencia de género como tema central y que lo hace, además, desde un punto de vista poco habitual, a través de los sentimientos de una víctima.
"En vez de relatar qué le hacían o cómo le hacían, relaté como ella se sentía porque al final nos acostumbramos a las escenas violentas, dan mucho morbo y yo creo que nos inmunizamos ante ellas y no sentimos nada, nos da un poco igual", explica días antes de la presentación oficial de la obra el próximo viernes 17 de junio.
En esta novela corta no incluye un relato de escenas violentas, una circunstancia que puede llamar la atención, pero que ella hace de forma meditada y consciente porque considera que "estamos acostumbrados al relato de escenas violentas en prensa continuamente". En concreto, solo detalla una escena en la que sí que hay cierta agresividad y el resto de la violencia se intuye, pero no se cuenta, sino que la sustituyó por "los sentimientos de esa mujer ante la situación que vive",
El enfoque desde el que plantea su historia tiene como punto de partida un control de tráfico de la Guardia Civil y es una patrulla de esta unidad del instituto armado la que nota que algo sucede con la víctima y decide actuar. El caso acabará en manos del Equipo de Mujer y Menor (EMUME) también de la Guardia Civil, que logra ayudarla a salir del ciclo de violencia en el que viven ella y su hija. Su marido y padre de la niña es el responsable y finalmente logra plantarle cara.
La intervención de la Guardia Civil es de acompañamiento. "Hablan con ella, se acercan, intentan que ella tome la decisión, mostrándole apoyo" y un día logra reunir el valor para dar el paso y para salir de esa relación y de la violencia. Para retratar todo ese proceso, se documentó y conoció en persona a agentes de ambas unidades de la Guardia Civil porque buscaba "ser fiel a la realidad".
Tanto en Tráfico como en el EMUME son dos agentes varones los que cobran protagonismo. También es una decisión de la autora del relato que toma con fundamento. Buscaba "mostrar el lado humano de hombres que se preocupan de la violencia de género" porque se muestra convencida de que hay muchos varones sensibilizados con esta realidad social y ella misma se siente "afortunada" de haberse encontrado con hombres que son aliados en la lucha.
También quiso trasladar con esta novela que "no hay un perfil" de víctima ni de agresor. De hecho, los protagonistas de esta novela son un agresor trabajador de banca y una víctima bien situada social y económicamente, para luchar contra el "estereotipo del maltratador de extracto social bajo" y trasladar que "a cualquier persona le puede suceder".
Milagros Domínguez García se crió en dos casas, las de sus padres y sus tíos, y asegura que "jamás viví una falta de respeto" o situaciones de violencia o de discriminación hacia las mujeres, pero es consciente de que se trata de una lacra muy extendida y ha conocido de primera mano situaciones de violencia en familias de todo tipo. Ahí nació su conciencia, "te vas sensibilizando conociendo a personas que lo han sufrido".
Esa mayor concienciación también ha ido de la mano de una mayor relación y conocimiento de la Guardia Civil. Surgió a raíz de una actividad de voluntariado en Redondela de las asociaciones Sonrisas y Somos Ponte Caldelas (de la que forma parte) y poco a poco se fue implicando en iniciativas como el Plan Director para la Convivencia y Mejora de la Seguridad en los Centros Escolares.
Esta vecina de Ponte Caldelas asegura que también ha aprendido mucho con sus hijos, un hombre de 22 y una mujer de 13, le han ayudado a "evolucionar como persona", abrir la mente, conocer distintos puntos de vista.
Todas esas enseñanzas las plasma en Proteger es mi deber, el honor mi divisa, un relato de un caso "real como la vida misma" contado de forma sencilla.
Aunque en la novela no aborda la importancia de la educación para cambiar dinámicas machistas y violentas, también están en el trasfondo y ella sostiene que es algo "fundamental" en muchos aspectos como, por ejemplo, "no nos educan en disolver nuestras relaciones" y muchos casos de violencia llegan en situaciones de separación o divorcio porque "no aprendemos a separarnos, a superar la frustración, el desamor, que no te quieran".
La novela se presentará este viernes 17 de junio a las 19.30 horas en la Casa das Campás de Pontevedra y contará con la participación confirmada de Susana Lopez Abella, Secretaria General de Igualdad de la Xunta de Galicia; y del general de división retirado de la Guardia Civil Ramón Rueda Ratón, autor del prólogo y que viajará a propósito desde Sevilla para acompañarla.
Parte de los fondos recaudados de su venta se destinarán a organizaciones sociales que trabajan con mujeres en riesgo de exclusión social. Se gestionará a través de distintas entidades, pero irá destinado directamente a sus receptoras y a actividades de satisfacción personal que les ayuden a tener una vida más normalizada y plena.
Relacionadas:
-
Pulseras solidarias que se traducen en horas de apoyo psicológico a víctimas de violencia de género
Por Redacción |
-
La Federación por la Igualdad de las Mujeres presenta un cubrevasos contra la sumisión química
Por Redacción |
-
Preocupación en las autoridades por el aumento de casos de violencia machista en Pontevedra
Por Alejandro Espiño |