El acusado de violar a una mujer en Bueu asegura que "esa noite estiven en Marín na miña casa"
Por Oskar Viéitez
Con la declaración del acusado J.L.G.M., la sección segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra ha completado este jueves la vista oral del juicio contra un vecino de Marín acusado de agresión sexual, lesiones y robo a una anciana en Bueu.
Este hombre ha insistido en su inocencia rechazando que fuese él quien violó a una mujer de 75 años tras acceder de madrugada a su domicilio.
Los hechos por los que se juzga a este hombre ocurrieron en la madrugada del 3 al 4 de marzo de 2017. "Esa noite estiven en Marín na miña casa", ha asegurado ante el tribunal igual que hizo ayer su esposa que confirmó esa coartada. J.L.G.M. también ha incidido en que su mujer "tiene el sueño ligero" y "sería imposible" que él se marchase de casa sin que ella lo supiera.
El acusado dijo no saber por qué aparecieron restos biológicos suyos en la vivienda de la víctima y tampoco dio explicación al motivo por el que un repetidor situó a su teléfono móvil a menos de 2 kilómetros en línea recta de la vivienda de la anciana, y a las 4 de la madrugada hora en la que se produjo el asalto.
Es más, este hombre afirmó que el teléfono lo compró en junio, aunque la fiscal le recordó que la documentación de Orange lo reconoce como titular de este dispositivo desde febrero.
El acusado ha admitido que conocía a la víctima y su domicilio por haber trabajado como albañil para hacer obras en esa vivienda en varias ocasiones pero ha indicado que antes de su detención, el 7 de noviembre de 2017, "pasaran catro ou cinco anos desde que estivese na súa casa". También reconoció que sabía que vivía sola y que había quedado viuda.
Cuando fue detenido, el juzgado de instrucción número 2 de Marín autorizó un registro en el domicilio del detenido en el que los guardias civiles localizaron, entre otros objetos, cinta aislante azul y una cuerda "coincidentes en sus características morfológicas y en su composición química" con las empleadas durante la agresión a la septuagenaria, algo que justificó este jueves ante el tribunal afirmando que tiene cinta aislante "de todas as cores" y que la cuerda "era para o tendedeiro".
En la sesión de este jueves, la tercera en este juicio, han declarado los peritos del servicio de Criminología de la Guardia Civil que explicaron los motivos del descarte de otros familiares sospechosos en las muestras de ADN y demás restos biológicos recogidos en la investigación.
También las psicólogas forenses dieron cuenta de las lesiones causadas durante el brutal ataque, entre ellas hematomas, desgarro vaginal y otras heridas provocadas por las ataduras. También detallaron las secuelas psicofísicas que padece la víctima como un trastorno neurótico y el tratamiento que ha necesitado.
El juicio quedará visto para sentencia el próximo lunes con la lectura de los informes de las partes. Se sabrá entonces si la fiscal mantiene o modifica su petición de condena. Inicialmente por la agresión sexual la representante del Ministerio Público solicitaba que este hombre que sea condenado a 15 años de cárcel; por el robo a 4 años; y por las lesiones, a 2 años de prisión.
También reclama que indemnice a la víctima en 8.460 euros por las lesiones y las secuelas, y que le devuelva los 1.250 euros que le robó.
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