Pedro De Lorenzo y Macías
¡Salustio: "Los hechos históricos no son patrimonio del poder dominante"! Primera parte
En la mitología griega consideraron a Clío como inspiradora de los acontecimientos históricos. Esta musa era muy ambigua, dejando un prisma de diversidad en los relatos de entonces.
¡Tristeza y paciencia! Observamos varios devotos de esta musa en nuestro entorno, que narran sus historietas, carentes de base en sus contenidos: "Memoria Histórica".
Los homéridas relataron la Odisea y la Ilíada con inventivas mitológicas. Lo mismo le sucedió a Virgilio con su Eneida. Ambas épicas carecen de argumentos serios sobre los hechos que narran. Las escribieron siglos después de los acontecimientos. Sus fuentes fueron algunas tradiciones y sus imaginaciones.
Cayo Salustio Crispo (86 A.C. – 34 A.C). Era de familia plebeya; su infancia y juventud estuvo crispada por enfermedades. Nació en Amiternum; su familia se trasladó a Roma e inició su carrera política. En su obra De Catilinae Coniuratione deja esta reseña: "Mas yo, desde muy joven, como muchos, me dediqué a la política por afición y allí tuve muchas experiencias negativas". Fue considerado el más importante de los historiadores latinos: analizaba las causas que producían los hechos y sus consecuencias.
En su infancia su educación fue en defensa de los valores que conllevan a la virtud a los seres humanos: honradez, respeto, defensa contra la injusticia, defender la verdad y no ser corruptos. En su estancia en Roma se olvidó de sus principios; estuvo con Cesar en Las Galias y fue pretor en Numidia, denominada, después de la guerra civil entre Pompeio y Cesar, Cartago Nova. Se enriqueció estafando a los civiles y abusando de los esclavos.
Vuelto a Roma, es acusado de adulterio y otras consideraciones. Cesar le aconsejó que se retirase a su Quinta, lejos de Roma. Asesinado éste por Bruto y otros senadores, vuelve a recuperar sus antiguos valores.
En el prólogo de su obra de Catilinae coniuratione, nos plasma esta reflexión, como un arrepentimiento de su conducta anterior: "Sed, a quo incepto studioque me ambitio mala detinuerat, eodem regressus statui res gestas populi Romani carptim, ut quaeque memoria digna videbantur, perscribere, eo magis, quod mihi a spe, metu, partibus rei publica animus liber erat". "En cambio, volví a aquel proyecto y a aquella afición de la que una mala ambición me había distraído, y decidí narrar las empresas del pueblo romano por episodios, en la medida en que me parecían dignas de recuerdo; más aún ya que para entonces tenía el ánimo libre de esperanzas, temores, facciones".
Obtuvo fama en sus obras historiográficas; la más conocidas son "De Catilinae coniuratione", y Bellum Iugurthnum" (Guerra de Yugurta). Analiza las causas de los hechos y plasma sus consecuencias.
Polibio (Megalópolis, Grecia, 200 a. C.-118 a. C.) comentó sobre la constitución republicana de Roma: "En cualquier situación esta estructura se mantiene debidamente equilibrada, tanto que resulta imposible encontrar una constitución superior a ésta".
En estos siglos los romanos, ya por su historial, ya por su sabiduría, eran proclamados padres de la patria y denominados senadores. El significado de senado se refiere a senex "viejo con gran experiencia"; era el órgano a proporcionar una orientación razonable y equilibrada al Estado Romano y su pueblo. Avanzado unas décadas, aparece la figura de patricio: descendientes de los Padres de La Patria y podían acceder al senado sin ninguna experiencia bélica, legislativa y moral. Esto motivó varios y duros enfrentamientos en la sede romana.
Estos patricios se encontraron con gran oposición de los optimates (hombres buenos) que se aplicaba a políticos, tradiciones, estrategias o ideologías en la República Romana Tardía. La Lex Ovinia (339-318 a. C) decretaba que los miembros del senado debían ser elegidos entre los mejores hombres. Los censores elaboraban lista de candidatos cada cinco años; los senadores mantenían el cargo por vida, siempre que no cometiesen actos deshonrosos. En el año 70 a. C, 64 senadores fueron excluidos por conducta indigna.
- Nota: ¿Pueden acceder al Congreso y al Senado personas que han desviado dinero público para sus propios interesas; condenados por algún delito de sedición o que han estado en contra de manera hostil hacia Nuestra Constitución; los que han apoyado o fueron miembros de banda armada? En roma 64 senadores fueron excluidos por conducta indigna.
Salustio plasmó la corrupción de las costumbres, lamentando la pérdida de valores esenciales del pueblo romano: "La pérdida de las virtudes en favor a las aspiraciones del poder". Todo se recicla, ya pasado 21 siglos. Observemos algunos miembros de nuestro gobierno.
PINCELADAS SOBRE CATILINA:
Posiblemente nació en 108 a. C, en el seno de una noble, "gens Sergia", carentes de gran fortuna. Su antepasado que llegó a cónsul, fue Cayo Sergio Fidenate (380 a. C). Poco se sabe de su padre; su bisabuelo, Marco Sergio Silo, participó con gran honorabilidad en la segunda guerra púnica.
Plasmamos unas pinceladas de Salustio sobre él, punto 5 "de Catilinae coniuratione": "Lucio Catilina (...) fue de gran fortaleza de alma y cuerpo, pero de carácter malo y depravado. A éste, desde la adolescencia, le resultaron gratas las guerras civiles, las matanzas, las rapiñas, las discordias ciudadanas, y en ellas tuvo ocupada su juventud.
Su cuerpo era capaz de soportar las privaciones, el frío, el insomnio más allá de lo creíble para cualquiera. Su espíritu era temerario, pérfido, veleidoso, simulador y disimulador de lo que le apetecía, ávido de lo ajeno, despilfarrador de lo propio, fogoso en las pasiones; mucha su elocuencia, su saber menguado.
Su espíritu insaciable siempre deseaba cosas desmedidas, increíbles, fuera de su alcance. A este hombre, después de la dictadura de Sila le había asaltado un deseo irreprimible de hacerse dueño del Estado y no tenía escrúpulos sobre los medios con los que lo conseguiría con tal de procurarse el poder.
Su ánimo feroz se agitaba más y más cada día por la disminución de su hacienda y por la conciencia de sus crímenes, incrementadas una y otra con aquellas artes que antes he señalado. Le incitaban además las costumbres corrompidas de la ciudad echadas a perder por dos males pésimos y opuestos entre sí: el libertinaje y la avaricia.
Puesto que la circunstancia ha traído a colación las costumbres de la ciudad, el asunto mismo parece aconsejarnos volver atrás y explicar brevemente las instituciones de los antepasados en paz y en guerra, cómo gobernaron la República y cuán grande la dejaron para que poco a poco se transformase de la más hermosa y excelente en la peor y más infame."
En varias religiones y filosofías defiende la reencarnación (budismo, jainismo, taoísmo y algunas religiones tribales): al fallecer el humano su espíritu escoge otra morada, según la vida que llevase en esta tierra. ¡Todo es cuestionable!
Lo cierto es que la conducta de Catilina es imitada por algunos que solo les interesan el poder: cambian de opinión frecuentemente y venden a cualquiera para lograr sus propósitos.
Quosque tándem, Catilina, abutere patientia nostra? ¿Hasta cuándo, Catilina, abusarás de nuestra paciencia? Con este interrogante Cicerón inició su discurso en el senado.
En la actualidad este interrogante se lo podemos aplicar a muchos que solo se preocupan de sus intereses, dejando en olvido las grandes problemáticas del estado, del pueblo.
Las problemáticas socio-económicas varían en el curso del tiempo; para resolverlas, hay que tener un consenso riguroso de todos los parlamentarios para enfrentarse a ellas.
La índole humana no se mutua, no cambia. La dualidad de una persona siempre fue y es el apeiron de todos los investigadores sobre la conducta humana. Muchos defienden que en nuestro ser hay una férrea y hostil dualidad: El Bien y El Mal.
Pio Baroja los define: Hijos de la Luz y hijos de las tinieblas. Una referencia: Émile Durkheim.
Los hijos de las tinieblas son astutos, pérfidos, cambiantes de opinión, egocéntricos.
Buscan el poder mintiendo y engañando a los colectivos con falsas promesas. No me refiero a nadie en concreto; me baso en los pocos conocimientos sobre la conducta humana. Es importante analizar las conductas de Napoleón, Hitler, Largo Caballero y El que cambia de parecer según sus conveniencias. Podrán opinar cuando expongamos los cambios de conducta de Catilina, siguiendo con rigurosidad a Salustio.
Seguiremos en el próximo ensayo, plasmando todos los pasos de Catilina para intentar lograr el poder, anulando "Mos Maiorum" (Constitución) e imponer una nueva legislación a su medida.
Pedro de Lorenzo y Macías.
Fuentes: Experiencias en Clásicas y filosofía.