Manuel Pérez Lourido
Tiempos de folk rock
Poco se habla hoy en día de folk rock, el estilo musical que se puso de moda en el Reino Unido y en EEUU a mediados de los sesenta. Arrancó tras la exhuberancia del revival folk en la Norteamérica de los años cincuenta y su apuesta por sonidos acústicos y letras comprometidas, marcando distancias con las propuestas más comerciales del pop. Surgió como una evolución natural del folk, aunque abrupta en algún caso. Uno de sus primeros héroes, el Dylan que veneraba a Woody Guthrie, el que estaba a partir un piñón con Pete Seeger y se inspiraba en la Anthology of American Folk Music de Harry Smith (1952), tuvo que sufrir el rechazo del público en el festival folk de Newport tras salir al escenario con una guitarra eléctrica y una banda de rock and roll, oh uh oh. Esto fue en 1965. Solo un año antes un grupo llamado The Byrds (siguiendo la serie de nombres de animales más o menos modificados The Crickets-The Beatles) se echaba a caminar. Jim McGuinn (luego cambió su nombre por Roger), Gene Clark y David Crosby, en manos de un manager de nombre Jim Dickson, habían logrado un contrato con Capitol, compañía que también tenía firmado a Dylan. Este, en un gesto que repetiría a lo largo de su carrera como una especie de seña de autor, había dejado fuera de su más reciente disco un tema impresionante titulado "Mr.Tambourine man". Un empleado de Columbia hizo llegar a Dickson un acetato con el tema y este convenció a la banda de que el tema tenía futuro. The Byrds recortaron los versos de la letra, se emplearon a fondo con sus preciosistas armonías vocales y, sobre todo, dieron espacio para que el repiqueteo de la guitarra de McGuinn se adueñase de la canción. Las voces y la guitarra fue lo único que el productor, Terry Melcher (hijo de la actriz Doris Day) les permitió grabar. Melcher, músico a su vez, consideró que las habilidades musicales de Clark y Crosby aún estaban verdes como para arriesgar dinero apostando por ellas. La canción salió al mercado en 1965, formando parte de un album del mismo nombre. El sonido del mismo fue etiquetado por la prensa musical como "folk rock" y el tema de Dylan llegó a número uno en la lista Billboard. Entre 1965 y 1966 el propio Dylan publicaría tres albumes soberbios (Bringing it all back home, Highway 61 revisited y Blonde on blonde) que el tiempo ha convertido en piedras angulares del folk rock.
Wednesday morning, 3AM, el primer album de Simon & Garfunkel vio la luz también en 1964, también con Columbia. Fue un fracaso de ventas. Simon se largó con la música a otra parte, concretamente a Londres, donde comenzó a tocar en cafés y pequeños teatros y donde publicó su primer disco en solitario "The Paul Simon songbook", editado tan solo en el Reino Unido.
Tom Wilson (productor de Dylan por aquella época) reaccionó rapidamente tras constatar que una de las canciones de Wednesday morning estaba siendo puesta en las ondas por una gran cantidad de emisoras de radio universitarias. Se trataba de "Sounds of silence". Así que Wilson contrató a unos cuantos músicos y regrabó el tema en el estilo guitarrero de los exitosos The Byrds. La versión folk rock de su tema, rebautizado The sounds of silence, horrorizó a Paul Simon cuando la escuchó, pero en enero de 1966 se hizo con el primer puesto en las listas de éxitos y provocó el regreso del dúo Simon-Garfunkel, que se convirtieron en estrellas durante el resto de la década.
En el Reino Unido, también en 1964, el grupo The Animals se apuntó un tanto con The house of the rising sun. Logró situar este tema del folklore norteamericano en lo alto de las listas británicas y norteamericanas. Adivinen qué compañía publicó la canción en Reino Unido: Columbia Records.
Fairport Convection, Pentagle, Strawbs, Steeleye Span fuero algunos de los más famosos combos de folk rock británicos durante la década. En EEUU podríamos destacar a Country Joe & the Fish, the Mamas & the Papas y Buffalo Springfield, entre otros.
El folk rock fue un natural e inevitable episodio de la evolución que el rock emprendió en los dos principales países de habla inglesa que se convirtieron en las dos primeras potencias de la industria musical a mediados del siglo pasado.