"Queremos que Marina siga sendo titora das nosas crianzas", grito reivindicativo en el colegio Manuel Vidal Portela
Por Redacción
Familias con escolares del aula de 5ºB de educación infantil en el CEIP Manuel Vidal Portela de Pontevedra han iniciado una campaña ante la previsión de la Consellería de Educación de suprimir una plaza de maestra de educación infantil en este centro escolar de Pontevedra. Las personas afectadas entienden que esta decisión provocaría que menores que contaron con la tutora Marina Garrido los dos últimos cursos no puedan completar su formación con ella en el último año del ciclo de educación infantil.
Por este motivo, estos familiares han decidido iniciar una campaña para recoger firmas en Change.org con la intención de que estos 17 escolares con necesidades específicas muy diversas continúen recibiendo clase por parte de esta educadora.
Las familias presentaron un escrito en la Xefatura Territorial de la Consellería de Educación y en la Dirección Xeral de Ordenación e Innovación Educativa de Pontevedra, pero aseguran que, hasta el momento, siguen sin respuesta.
Señalan que, en este momento, tienen la incertidumbre de quién será la tutora de este grupo durante el próximo curso académico, en 6º de educación infantil.
Aseguran también que Marina Garrido Eirín presentaba un alto nivel de cohesión y una evolución muy favorable en las capacidades de integración y socialización de estos menores. Reclaman a la Consellería de Educación que tenga en cuenta criterios pedagógicos para evitar esta decisión.
Estas familias explican que la profesora como tutora desarrolló durante dos años un gran trabajo atendiendo a la discapacidad del área de lenguaje que existe en el grupo; el trabajo en equipo y la integración de una situación de discapacidad dentro del grupo, a través de recursos efectivos como el juego y la cooperación para fomentar la comunicación.
Denuncian la falta de previsión organizativa por parte de la Consellería de cara al próximo curso al no haber puesto en marcha medidas para captar más matrículas sabiendo que las condiciones del ciclo exigían la supresión de un puesto de trabajo. Tampoco, señalan, avisaron a la docente para que pudiera cerrar su trabajo y preparar a los escolares para el relevo en la tutoría.
Ante esta situación, piden una solución organizativa que permita mantener a Marina Garrido como tutora y que se tenga en cuenta que las niñas y niños del grupo, de 4 y 5 años, están en una edad muy temprana para perder su tutoría. Temen que la adaptación a otra persona que desempeñe ese papel supondrá un "duro golpe" para este grupo de menores.