Investigan la muerte de una octogenaria que se cayó desde un tercer piso
![Redacción](/web/cache/scene/uploads/xornalistas/foto/_S7QytKoutjK3UsovKMnMzytWsi62MjSxUqrKz891Lsov0DEyAC_/_Il61oA_/506490f5a15ce-c6ku5opwb5qbtijalxd0_reasonably_small.jpeg)
Por Redacción
![](/web/cache/scene/uploads/fotos/foto/_S7QytKoutjK3UsovKMnMzytWsi62MjKxUipKLc6sStUxMjDQSU_/_7NK0kt0snNTEnJSVWyrgUA_/5268342b7e83b-suceso-gafos-2.jpeg)
© Diego Torrado
![](/web/cache/scene/uploads/fotos/foto/_S7QytKoutjK3UsovKMnMzytWsi62MjKxUipKLc6sStUxMjDQSU_/_7NK0kt0snNTEnJSVWyrgUA_/526834907a50a-suceso-gafos-3.jpeg)
© Diego Torrado
La Policía Nacional y el Juzgado de Instrucción número 3 de Pontevedra han abierto una investigación para esclarecer la muerte de una mujer de 79 años que sobre las 20.00 horas de este miércoles se cayó desde un tercer piso en la calle Ponte Novo, en la zona de Palamios.
La víctima es una vecina de la calle Ponte Novo que vive con sus dos hijos, pero en ese momento estaba sola en casa. Por motivos que se desconocen, se precipitó desde su ventana del tercer piso y las primeras informaciones recogidas en el lugar de los hechos parecen apuntar a que falleció en el acto.
Las primeras investigaciones descartan que se pueda tratar de una muerte violenta y apuntan a que la mujer pudo caerse por despiste o incluso pudo haberlo hecho de forma voluntaria, pero ni la jueza ni la Policía lo han determinado todavía. Los vecinos del propio inmueble explicaron que la mujer, viuda desde hace un año, presentaba una grave dolencia desde hacía tiempo.
Todo ocurrió pasadas las 20.00 horas. Una joven que bajaba por las escaleras del hotel Dabarca hacia Palamios vio cómo una persona se precipitaba e iba a parar a una zona de césped situada al pie del río dos Gafos, a escasos metros del puente de la calle Ponte Nova. Inmediatamente se dirigió al punto en el que se había caido y, cuando llegó, se encontró con una mujer de edad avanzada con múltiples fracturas que aparentemente ya no respiraba.
En cuestión de segundos llegaron al lugar un hombre que estaba en la acera de enfrente y una vecina del edificio que escucharon un fuerte ruído y, al asomarse para ver qué pasaba, vieron un cuerpo tirado en el suelo. Habían sentido el impacto y entre los tres intentaron reanimar a la víctima, pero ya había fallecido.
Los testigos alertaron de forma inmediata a la Policía Nacional y el 061 y una ambulancia se desplazó hasta el lugar, pero ya no actuó. De inmediato, tres patrullas policiales acordonaron la zona y dieron aviso al Juzgado de Guardia. Se acababa de abrir la investigación para esclarecer la muerte mientras en el lugar se producían escenas de dolor, en especial en el momento en que llegaron los dos hijos de la fallecida.
Alrededor de las 21.00 horas llegó al lugar una dotación de la Policía Científica y, posteriormente, el servicio funeraria y la jueza de guardia. Sobre las 21.50 horas se ordenó el levantamiento del cadáver y los integrantes de la comisión policial y judicial se dirigieron al interior del piso de la fallecida para recabar datos que ayuden a esclarecer lo sucedido y se entrevistaron con sus dos hijos.