Desmantelan un almacén clandestino con 50 piezas de arte sacro y 154 animales protegidos naturalizados
Por Natalia Puga
Un total de 50 piezas de arte sacro entre las que se encuentran un obispo, una Santa Catalina y un Ecce Homo del siglo XVI; una mamoa; un trisquel neolítico; y una amplia lista de obras datadas entre los siglos XV y XIX y del período paleolítico; así como otros 154 ejemplares de animales naturalizados de especies protegidas, muchas en grave peligro de extinción, entre ellas, 11 colmillos de marfil -algunos tallados- valorados en al menos 100.000 euros, un leopardo de las nieves del Himalaya, un león, un tigre o dos cuellos de jirafa.
Todos esos elementos, junto a un lote de objetos de interés paleológico y arqueológico y una serie de armas prohibidas denominadas rompepiernas y 13 bayonetas, fueron localizados en una misma propiedad de Salvaterra do Miño en propiedad de un hombre que ya ha sido detenido por delitos contra la fauna y el patrimonio histórico y cultural, receptación, contrabando y tenencia ilícita de armas.
La detención -posteriormente quedó en libertad por orden judicial- y la intervención de todo el material son resultado de un complejo trabajo realizado por el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de Pontevedra cuyos detalles se han dado a conocer este jueves en la Comandancia.
El coronel jefe, Jorge González Veiga, y el teniente del Seprona, Álvaro Lago Lusquiños, dieron cuenta de la operación, que se ha bautizado como 'Hiposacro' y que supone un importante golpe a la venta a través de Internet de arte sacro y al tráfico ilegal de especies protegidas. No ha podido calcularse todavía el valor de todo el material intervenido, que aún está siendo tasado, pero sí han facilitado cifras que ayudan a hacerse una idea del volumen de las operaciones que han podido frustrarse. Tan sólo en el año 2011 el ahora detenido realizó operaciones de compraventa por valor de 400.000 euros.
La operación comenzó el pasado mes de mayo. Agentes del Seprona tuvieron conocimiento de que una persona tenía a la venta a través de Internet una pata de hipopótamo, una tortuga y un arma avancarga. Ante las sospechas de que pudiese tratarse de especies protegidas según el Convenio sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestre, conocido como Convenio CITES, se puso en marcha una investigación que ahora está a punto de cerrase con un exitoso resultado.
Los investigadores averiguaron la identidad de la persona que las tenía a la venta utilizando un nick y, con la excusa de realizar una inspección administrativa, entraron en su casa, un Pazo con varias construcciones anexas en Salvaterra. En un primer momento se mostró colaborador, pero, cuando se le pidió la documentación que acreditase que esas piezas que vendía eran suyas, no pudo aportarla y, además, se negó a que los agentes entrasen en las construcciones anexas a su vivienda.
Los agentes siguieron investigando, detectaron 407 anuncios en Internet en los que ese mismo usuarios ponía la venta objetos de similar característica y, ya con la colaboración de la Fiscalía y autorización del Juzgado de Instrucción número 2 de Ponteareas, el pasado 27 de junio realizaron una inspección en su propiedad que permitió descubrir el completo arsenal clandestino e ilegal.
El propietario fue detenido y se constató que cuenta con antecedentes administrativos por contrabando de una serpiente a través del aeropuerto de Santiago de Compostela. El hombre tiene doble nacionalidad española y francesa, hijo de padre francés y madre gallega, pero nació en el país vecino y no se instaló en Galicia hasta 2010, con la excusa de cuidar a su madre. Allí ejercía de abogado, pero en Salvaterra no tiene profesión conocida y solo se ha podido establecer que en el año 2007 ya tuvo actividad de ventas a través de Internet.
Los investigadores sospechan que se dedicaba a la compra y venta de objetos y especies prohibidas, muchas traídas Galicia desde el extranjero de forma irregular y otras derivadas de robos, una actividad que le reportaba importantes beneficios. Con su detención, se considera desmantelado uno de los más importantes centros clandestino localizado en la comunidad con esta actividad.
La operación no se ha dado por terminada porque aún queda pendiente establecer el origen de la mayor parte de las piezas localizadas en su propiedad y también tasar la gran mayoría. El Seprona cuenta con la colaboración de técnicos del servicio de Patrimonio de la Xunta de Galicia y el decano de la facultad de Geografía e Historia de la Universidad de Santiago de Compostela (USC), experto en arte sacro y también tendrán que intervenir tasadores de Aduanas.