Piden dos equipos más con personal fijo en la Unidad de Discapacidad para atender más de mil casos anuales
El personal del centro de valoración de Discapacidad de la Xunta en Pontevedra y representantes sindicales se concentran todos los martes a las puertas del edificio de la antigua Delegación de Sanidade en la avenida de Vigo para reivindicar más personal que pueda resolver los actuales problemas a los que se enfrenta este servicio.
Denuncian que las personas que se encuentran a la espera de una valoración de su grado de discapacidad llevan un retraso de 3 años en las evaluaciones y los dos equipos operativos formados por un profesional médico, psicólogo y trabajador social que realizan este trabajo para el área norte de Pontevedra se ve desbordado. Atienden más de mil casos anuales.
La Xunta les ha anunciado la instalación de seis nuevos equipos para hacer frente a las listas de espera pero con personal temporal por un período de nueve meses. Estos equipos trabajarían en un local en la calle Cruz Vermella. La solución no convence a Areceli Blanco, una de las doctoras de los equipos que trabajan para Política Social en estas valoraciones. Afirma que este personal necesitará al menos un mes de rodaje y supervisión de los profesionales de los otros dos equipos, unidades que llevan 25 años trabajando con el mismo número de empleados y con cada vez más demanda.
Los representantes sindicales, a través de Fernando García de la CIG, entienden que es preciso un incremento de personal estable que ofrezca soluciones de manera continuada y que también se cubran las vacantes por jubilación.
El Sergas está ejecutando un convenio en el que se decidía que las valoraciones se acometan a través de informes y no de manera presencial, una medida con la que los profesionales se muestran en desacuerdo.
Los grupos parlamentarios de En Marea, PSOE y BNG presentaron en el Parlamento de Galicia enmiendas sobre este tema que todavía no han recibido respuesta por parte del gobierno de la Xunta. Mientras no haya una respuesta satisfactoria, los representantes sindicales indican que mantendrán su calendario de protestas porque estas malas condiciones de trabajo están afectando a miles de personas, que están pendientes de valoraciones sobre su discapacidad. Los trabajadores reclaman dos equipos más de trabajo con personal fijo, que mejore la eficacia del servicio.