14 años después de sufrir un secuestro ve a sus captores en el banquillo
Por Natalia Puga
El 16 de agosto de 1999 José Manuel Fernández Miranda fue secuestrado en la casa de sus padres en Santa María de Oia. Tras golpear a toda la familia, entre ellos a su novia, los captores le llevaron a Valladolid y le torturaron durante varios días casi hasta causarle la muerte. Parte de los responsables fueron interceptados ya de regreso a Galicia y otros en Murcia y en el año 2006 cuatro de los siete integrantes del clan de narcotraficantes de Avila 'los Píos' fueron condenados por la Audiencia Provincial de Pontevedra a 22 años de cárcel por estos hechos.
Sin embargo algunos de los responsables no pudieron ser juzgados al encontrarse en paradero desconocido. Tras seis años de búsqueda, las Fuerzas de Seguridad les localizaron en diciembre de 2012 y este miércoles 20 de febrero de 2013 se sentaron en el banquillo de los acusados de la Sección Primera de la Audiencia dos más.
La sentencia que se dictó en 2006, y que fue confirmada ya por el Tribunal Supremo, concluyó que los secuestradores confundieron a José Manuel Fernández Miranda con otra persona, alguien en cuya casa pretendían encontrar dinero o drogas. Por fin ha podido ver a casi todos los que le torturaron por equivocación pasar por el banquillo, si bien aún queda pendiente un último acusado.
El presidente de la Audiencia Provincial y de la Sección Primera, Francisco Javier Menéndez Estébanez, explicó al término de la vista que los dos acusados, un hombre y una mujer de etnia gitana, reconocieron las acusaciones y llegaron a un acuerdo de conformidad con el fiscal. El hombre cumplirá seis años de cárcel, dos por robo con violencia e intimidación, tres por detención ilegal y uno por tenencia ilícita de armas. La mujer cumplirá dos años como cómplice de la detención ilegal.
En ninguno de los dos casos se ha tenido en cuenta la circunstancia atenuante de dilaciones indebidas a pesar de que el delito juzgado se remonta a hace casi 14 años porque el motivo de que el juicio no se celebrase antes es que los dos acusados estaban en paradero desconocido.
El presidente de la Audiencia explicó que este juicio tiene otra característica extraordinaria al margen de que se enjuicie un delito de hace 14 años. Y es que la Sección Primera ya no lleva casos de delitos penales desde hace nueve años, pero en el caso de este sumario la vista se celebró en esta sala porque es un tema que se arrastra de años atrás.
Otra característica de la vista oral es que se realizó en un día en el que había convocada una huelga de jueces y fiscales, pero ninguno de los profesionales que tenían asignado el juicio se sumaron a la convocatoria. Al término del mismo, sí que se unieron a la concentración convocada a las puertas de la Audiencia Provincial.