A juicio tras una espectacular huída a más de 110 km/h por las calles de Pontevedra
Por Natalia Puga
Un vecino de Marín deberá rendir cuentas este lunes en el juzgado por haber puesto en peligro la vida de otros conductores y personas y por conducción manifestamente temeraria durante una espectacular huída por la calles de Pontevedra. Conducía un BMW e intentaba escaparse de la Policía Local tras protagonizar un accidente en el que derribó un semáforo. En la persecución llegó a superar los 110 kilómetros por hora.
El joven está acusado de un delito de conducción temeraria por unos hechos que se remontan al sabado 2 de febrero sobre las 7.30 horas de la mañana. El vehículo que conducía se vio implicado en un accidente entre las calles Manuel del Palacio y Fernández Ladreda, se salió de la vía y derribó un semáforo.
En lugar de detenerse, huyó, pero volvió poco después para recoger algunas de las piezas de su BMW que habían quedado en la calle tras la colisión supuestamente para evitar ser identificado siguiendo el rasto a los restos del vehículo. Tardó demasiado, pues ya había sido localizado por la Policía Local y una patrulla le dio el alto.
El conductor supuestamente desoyó el mandato policial y comenzó una fuga a toda velocidad por las calles Fernández Ladreda y Eduardo Blanco Amor hacia Salcedo. En su fuga puso en peligro al resto de conductores y peatones, que se vieron obligados a apartarse de la calzada para evitar un accidente, en algunos casos llegando a realizar maniobras bruscas para apartarse del camino del turismo a la fuga.
Durante todo el recorrido fue perseguido por la Policía Local, que constató que superó los 110 kilómetros por hora, cuando en todas las calles del centro urbano la velocidad está limitada a 30. En un momento de la persecución, una patrulla logró adelanar al BMW, pero el concuctor intentó embestir el vehículo policial.
En ese momento, los agentes le perdieron de vista, pero un testigo les indicó que lo había visto dirigiéndose hacia la zona de A Chamusca, en Salcedo. La Policía Local le localizó, pero acabó perdiéndole de vista. Poco después, logró ser identificado a través de los datos de su vehículo que habían sido recogidos por la Policía Local. Le localizaron en su casa de Marín al segundo intento y ha quedado citado para este lunes para un juicio rápido.