Duelo de bolsas de basura en la calle Michelena
Por Natalia Puga
Lanzándose bolsas de basura el uno al otro. Así localizaron los agentes de la Policía Local de Pontevedra a dos jóvenes en plena calle Michelena. Eran las 23.10 horas y tan sólo una hora antes ambos habían sido sorprendidos, junto a una tercera persona, rompiendo bolsas de residuos y golpeando portales y locales comerciales por las calles Gutiérrez Mellado y Herreros.
Todo ocurrió en la noche del lunes. A través de avisos ciudadanos, los agentes de la Policía Local tuvieron noticias de las 'fechorías' de los tres jóvenes sobre las 22.10 horas. Tras recibir el aviso, se desplazaron al lugar, pero tan sólo quedaba el rastro que habían dejado: basura tirada por el suelo en la calle Gutiérrez Mellado, bolsas rotas y vecinos molestos porque unos jóvenes habían estado haciendo ruído al golpear sus portales y los escaparates de los bajos comerciales de la zona.
Tan sólo seis minutos después, los agentes localizaron a los autores de estos actos vandálicos. Estaban repitiendo comportamiento en la calle Herreros y un ciudadano aseguró a los policías que eran los mismos jóvenes que habían estado en Gutiérrez Mellado, de modo que los agentes procedieron a identificarles y denunciarles ante la Subdelegación del Gobierno de Pontevedra por actos vandálicos y alteración del orden públicos. Resultaron ser tres jóvenes de 16, 18 y 19 años.
Esa misma noche, pero una hora más tarde, volvieron a actuar. Una patrulla diferente que estaba realizando tareas de prevención por la zona de A Ferrería tuvo conocimiento, a través de un ciudadano, de que había dos jóvenes en actitud reprochable en la calle Michelena, de modo que los agentes se dirigieron al lugar y les vieron tirándose basura uno a otro y todo el entorno lleno de bolsas rotas.
Cuando los policías locales se acercaron para identificarles, uno levantó el brazo con supuesta intención de golpear a un agente, de modo que se pidió una patrulla de refuerzo. Cuando llegó la segunda patrulla comprobó cómo los jóvenes se enfrentaban a sus compañeros uniformados y les gritaban. Esa segunda dotación policial, además, pudo reconocer a los chicos como los responsables de la 'escena' de una hora antes.
Los dos jóvenes fueron identificados, pero uno de ellos resultó ser menor, de modo que la Policía Local se puso en contacto con su madre para que se hiciese cargo de él.