Un acusado de intento de asesinato se declara inocente y su víctima le acusa "segurísimo"
Por Mónica Patxot & Natalia Puga
"Ao saír do coche xa me pegou o primeiro tiro na cabeza e empezou a disparar". Es la declaración de un hombre que en noviembre de 2011 recibió tres tiros en la cabeza y el hombro que le propinó, según su declaración, un conocido, José Luis F.U., en una pista forestal de Tui. El supuesto autor de los disparos se sentó este martes en el banquillo de los acusados de la Audiencia de Pontevedra procesado por un delito de asesinato en grado de tentativa por el que la fiscal pide que sea condenado a 11 años de prisión. ÿl sostiene su inocencia.
El juicio celebrado en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial sacó a la luz dos versiones totalmente contradictorias de lo ocurrido en la madrugada del 14 de noviembre de 2011. Mientras el herido asegura que está "seguro no, segurísimo" de que el procesado fue la persona que le disparó, el acusado mantiene que esa noche estuvieron de fiesta juntos, pero él se fue a dormir a casa de sus padres en el momento en que en la casa en la que estaban "acabouse a droga e non tiñamos nin diñeiro nin drogas" y nunca acudió con la presunta víctima a la pista forestal en la que supuestamente le disparó.
El fiscal mantiene que José Luis F.U. y su víctima, Roberto, acudieron juntos a una pista sobre las 6.30 horas en el coche del lesionado y, "con el propósito de causarle la muerte", se acercó a muy corta distancia con el pretexto de pedirle que le echara agua por las manos para lavarlas. De manera absolutamente sorpresiva y sin darle ninguna posibilidad de defensa, realizó al menos seis disparos con un arma de fuego corta, de los que tres le impactaron en la zona retroauricular izquierda y en el hombro izquierdo, sin lograr su objetivo al cerrar la víctima la puerta del vehículo y arrancar y huir del lugar.
Esta versión fue corroborada por el lesionado, que explicó que hacía unos dos meses que conocía al procesado porque tenían un amigo en común y solían quedar con frecuencia. La noche de los hechos le llevó a varias paradas de Ponteareas y, en un momento dado, le pidió ir a la citada pista. ÿl no llegó a salir del coche, sino que "en canto puxen un pé fora, xa me deu o primeiro disparo". Logró entrar de nuevo en el vehículo y conducir hasta el cuartel de la Guardia Civil, "conducindo cunha man porque a outra tíñaa paralizada".
La víctima: "Personalmente, le perdono. Para hacer una cosa como esa, tenía que estar enfermo"
En su declaración ante el tribunal indicó que más de tres años después todavía desconoce los motivos que pudo tener para dispararle, pues no tenían problemas previos ni habían discutido aquella noche. Esta declaración se contradice con la realizada aquel día al primer guardia que le atendió, al que le dijo que habían tenido una discusión previa.
José Luis F.U. mantuvo su inocencia en todo momento. Había salido de prisión poco tiempo antes y residía en Portugal, pero esa noche acudió la zona de Baixo Miño y quedó con la presunta víctima, a quien conocía "de toda la vida", y otros amigos. En un momento de la noche fueron a comprar cocaína y heroína a Ponteareas y la consumieron en una casa hasta que se acabó el estupefaciente y él decidió irse a dormir.
El acusado negó haber estado con el lesionado en la pista en la que sucedieron los hechos y también que, al día siguiente, hubiese huído para eludir ser detenido. A pesar de que en su día fue declarado en rebeldía, él aseguró que esa noche durmió en casa de sus padres y luego estuvo viviendo y trabajando en Portugal y volvía a España con frecuencia.
El juicio quedó visto para sentencia con la petición de once años de prisión y ninguna indemnización, pues la víctima renunció a cualquier dinero que pueda entregarle el procesado porque "personalmente, le perdono". Considera que "para hacer una cosa como esa, tenía que estar enfermo" y no quiere que le indemnice.