Cómo certificar los valores inmateriales y espirituales de los bosques
Por Oskar Viéitez
La conservación de los bosques implica numerosos beneficios como su contribución a la mitigación de los efectos del cambio climático y a la preservación de la biodiversidad, la producción de madera y de otra serie de productos, pero también hay otros rendimientos de carácter inmaterial, como aquellos ligados al ocio y bienestar del ser humano.
En la Escuela de Ingeniería Forestal están trabajando en el desarrollo de una metodología dirigida a certificar esos valores inmateriales o espirituales ligados a los bosques, que tratarán de poner la prueba en masas forestales ligadas al Camino de Santiago.
El investigador principal del grupo AF-4, Enrique Valero, explica que con este trabajo "se trata de conseguir en un futuro una certificación forestal de los bienes inmateriales e intangibles de los bosques".
Valero incide en lo novedoso de una propuesta que toma como punto de partida los Criterios de la Gestión Forestal Sostenible, definidos en la conferencia interministerial de Helsinki. "Será la primera vez que se intentan conseguir indicadores de sostenibilidad ligados a aspectos inmateriales, pero sí apreciables, tales como bienestar, salud, espiritualidad, valor experiencial, calidad estética y otros relacionados con la experiencia perceptiva y emocional", destaca.
Para eso será necesario definir un conjunto de indicadores que permitan evaluar si una masa forestal o un tramo de bosque cumplen una serie de criterios que permitan reconocerlos "como de excelencia" a través de una certificación, al igual que otros productos derivados de los bosques son reconocidos con certificaciones como PEFC.