El Teucro cumple con Hacienda y ve la luz al final del túnel
Por Diego Espiño
"Pasado este escollo sería una calamidad que nos quedáramos en el camino". Así de claro se ha mostrado el presidente de la Sociedad Depotiva Teucro, Carlos García-Alén, tras confirmar que este miércoles el club pontevedrés ha depositado en la Agencia Tributaria los 38.000 euros que debía abonar antes del día 7 dentro de los plazos de pago negociados para la deuda privilegiada.
Si la entidad azul no cumplía este pago se podría haber visto abocada a su liquidación sin poder empezar siquiera la próxima temporada.
El balón de oxígeno es importante, tanto que García-Alén asegura que este pago le quitaba el sueño y que una vez cumplido el trámite "hoy por hoy las perspectivas son mejores que la temporada pasada".
La directiva ha realizado un préstamo personal para poder pagar a tiempo a Hacienda
Con todo no ha sido fácil cumplir con Hacienda ante la falta de liquidez que asola las cuentas del club, y sólo ha sido posible con las aportaciones recibidas por las concejalías de Deportes y Promoción Económica y también por un préstamo personal de la directiva.
El club azul se asegura así tranquilidad no sólo para el inicio del curso, sino para toda la temporada, ya que el presidente confirma que podrán afrontar sin tantas complicaciones el siguiente pago con la Agencia Tributaria, otros 38.000 euros en el mes de diciembre.
A partir de entonces "la guinda sería llegar a un acuerdo con Hacienda para aplazar los meses de julio de 2015 y 2016" y pagar esas cantidades en diciembre de 2017 y 2018.
Paralelamente la directiva teucrista sigue tratando con los acreedores para lograr la condonación de la deuda ordinaria o su intercambio por publicidad. De esta forma se han logrado acuerdos por valor de 300.000 euros del total del medio millón aproximado de la deuda ordinaria, según apunta el dirigente.
Sería lo más urgente, y después vendría ya de forma más regulada la deuda subordinada que ha quedado aplazada en el consurso de acreedores.
En definitiva, como resume el dirigente azul, "tenía obsesión por salir adelante de este problema y ahora podemos pensar más en el futuro", con la cabeza puesta en una temporada en la que se abre un nuevo ciclo deportivo tras la llegada de Quique Domínguez al banquillo del Municipal.