Pablo Cacheda de Paz
Pasarón de "la mejor afición de Galicia" a "estadio al que no va nadie", dicen...
El otro me dio por zapear y ver "El Chiringuito" (que acertado es el nombre del programa), y fugazmente, pasaron por una noticia de unos 20 segundos sobre el aniversario de los 100 años del Valencia, entre múltiples noticias que hablaban del buen hacer de Cristiano en la Juventus.
Ah!, también hablaban de los pitos a Setién en el Betis, mientras yo observaba dos estadios llenos de gente que quieren a su club. Dos aficiones de las más críticas, dicen.
Últimamente me inquietan los titulares tipo "Las peores entradas de Pasarón en años".
Me pregunto cuando fue la primera vez que se escuchó aquello de "en Mestalla solo pitan", "en el Bernabéu no cantan" o "a la Malata no va nadie" (curiosamente el Racing de Ferrol en Tercera tiene entradas muy similares a las de Segunda B).
Es entonces cuando analizo junto a mi compañero de grada, con el que llevo yendo solo sin mucha más compañía a Pasarón varios años: ¿por qué? Luismi, entrenador del Ponte, atónito en ruedas de prensa, probablemente no la sepa contestar, y cuando le preguntan solo puede responder que tal como va el equipo debería ser de otra manera.
El fútbol tiene memoria corta. Empecemos por ella, la memoria más corta de todas.
Esta memoria nos hace buscar culpables en promociones extrañas (que lo son) para partidos de esta temporada, en el mal año deportivo la campaña pasada, en que hace nada estábamos en tercera y nos desanimamos... en el calor, en la lluvia, en la TVG.
El aficionado joven tiene algo más de memoria. Vamos con ella.
Hace dos temporadas, con la grada joven Norte 1941, un grupo de aficionados entusiasmados intentaba organizarse a principio de temporada, con el equipo recién ascendido. Con el entusiasmo del día del Haro, trabajaron varias tardes, se organizaron... Tardes geniales como la de Racing de Santander, carpas, consiguiendo y poniendo cervezas altruístamente... Lo menos que hacían era todos los fines de semana en un bar donde una media de 50 aficionados calentaban (calentábamos).
Aunque la "organización" como tal tuvo escaso éxito, duró 4-5 meses y la versión oficial de aquello dijo que había "disputas internas", la realidad es que esos aficionados se seguían reuniendo para cantar en el bar toda la temporada. Toma disputas internas. Permítanme la temeridad de expresar que en aquel momento lo que había era una falta de criterio común en como actuar con respecto al club, con mayor o menos independencia. Ese fue para mi el problema.
El aficionado adolescente parecido de memoria.
En tercera, sin demasiada organización, crece un aficionado joven al que le gusta el Pontevedra, las fases de ascenso y recibimientos al equipo (con el Puertollano por ejemplo) animan a crear pequeños grupos de animación alrededor de una ya adulta y algo "cascada" (si alguien me lee que lo entienda con cariño) Furya Granate.
El aficionado adulto tiene aun más memoria.
Corría la época de Segunda B previa a bajar a Tercera División, unos 5 años antes de bajar. "la época de los brasileños" para los menos rigurosos.
Una endeble Federación de Peñas se tambaleaba por su dependencia en los últimos directa al club (¿nos suena?). De aquello salió Unión Granate (hoy por hoy una peña más). Aquello fue un intento más de moverse, de captar gente, de animar. Se sacaba una revista que llegó a tener más de 30 números,donde los redactores eran sus aficionados, y se intentó recuperar la "Marea Granate" de años anteriores. Innumerables desplazamientos con buses y patrocinadores buscados finde tras finde para abaratar buses. El proyecto se murió por inanición y bastante éxito es que la peña siga viva.
Aún hay un aficionado algo más maduro con más memoria.
Aquel aficionado que vivió los tres años previos al ascenso a segunda división del 2003/2004.
Este nostálgico aficionado se acuerda de la "Marea Granate" de Ourense como germen de algo grande, que acabó en lo que todo sueño de aficionado acaba, en un ascenso consumado al cabo de un tiempo. Quizás era una época, donde una Federación de Peñas, más afín al club por momentos organizó más cosas pero esa dependencia hacía que una joven y entusiasta "Furya Granate" fuera por su cuenta, siendo un grupo de animación visiblemente más fuerte y ruidoso que movía por aquel entonces a la grada.
Vamos con el aficionado un aficionado más veterano.
Este recuerda "dar pena" por Segunda B, barrizales, problemas económicos, con "los de siempre" en el campo que estaban a las duras y a las maduras. Sin televisiones. Con gente de la casa. Y ventas millonarias de cracks que salvaban al club. Ojo, hablo de los 80-90. Y sin riguroso conocimiento.
STOP
¿No estamos tan mal no?
No tenemos barrizales, tenemos algo más de gente de la casa en el equipo (al menos gallegos) y económicamente (algo) más estables y encima es buena temporada.
¿Entonces qué falla?
Falla la ilusión, el esfuerzo, el altruismo, la movilización del aficionado, la comprensión del club hacia ellos, entender el esfuerzo de los últimos años, no echar la culpa al aficionado y socio cuando la cosa se tuerce.
Falla por cierto aprovechar los momentos donde la televisión nacional nos hace la publicidad de nuestra vida con Broncano, falla el contenido audiovisual, fallan las redes que consume el aficionado más joven (Instagram?), donde siguen a sus ídolos del Ponte.
Pero el jovencito no tiene alicientes, el adolescente cortoplacista y ve que igual no vale la pena pelearlo, el maduro lo intentó pero se cansó de intentarlo dos veces, el adulto está cansado de repetir la historia 5 veces. Y el veterano que vivió los barrizales dice "No estamos tan mal".
El aficionado está tranquilo, pero esperando a tener que llamar a la puerta de 5 amigos y volverlos a llevar a Pasarón. Y si para ello tiene que haber una fase de ascenso, que esta sirva para ello. Estoy seguro que el Instagram Stories ardería con #pontevedranuncaserinde como hace dos años.
Y para el año, pues una campaña en condiciones, adaptada a los tiempos, con planificación de acciones toda la temporada sin improvisaciones.Y si hay un buen equipo pues genial y vuelve a ser buena temporada genial. Poco a poco.
Autocrítica, pero todos, no queremos ser el "Mestalla de los pitos" ni el "Bernabeu comepipas".