VÍDEO.- La otra cara del turismo: autobuses llenos y gente desesperada esperando durante horas bajo el sol
Por Almu Dapena
El sector turístico está alcanzando cifras de récord este verano y eso es algo que notan especialmente los habitantes de localidades como Pontevedra, Combarro o Sanxenxo, que viven en su día a día la cara no tan alegre de la temporada estival: autobuses y gente esperando bajo el sol durante horas para que los conductores no les abran las puertas.
Este ha sido el caso de numerosas personas que esperan el transporte público en Combarro para ir a Pontevedra. El autobús sale desde O Grove y va recorriendo todo el litoral haciendo paradas en las playas pero, cuando llega a Combarro, está lleno de gente y "no nos dejan subir. Se supone que viene otro de refuerzo pero es mentira", admite Noelia, trabajadora del Mirador de Combarro y afectada. "Pasa un autobús cada hora, a veces dejan subir a dos o tres personas pero hay muchos que no nos dejan y es desesperante", reconoce después de vivir esta situación durante varios días.
Ante esta circunstancia y con las paradas llenas de gente y sin sitio donde resguardarse del sol, cuatro usuarios decidieron plantarse delante de un autobús para que les dejaran subir. "El de las 16:45 llegó a las 17:25 y, antes de llegar a la parada, el conductor ya nos dijo que no iba a parar. Había sitio en el pasillo, ya sabemos que no se puede ir ahí, pero hay algunos que dejan y otros que no", critica Noelia.
Añade que "medio pasillo iba con gente" y se pregunta por qué "si hay gente en el pasillo no nos dejan subir a nosotros". La situación se repite "todos los días y se generan nervios porque a los conductores se la suda, son muy desagradables y siempre están discutiendo".
Como resultado, tanto turistas como usuarios habituales del servicio público tienen que buscarse la vida y pedir taxis para llegar a su destino. En el caso de Noelia, que tiene que realizar el trayecto Pontevedra-Combarro, y viceversa, seis días a la semana por motivos laborales, no le compensa porque "se te va el sueldo. Esto no se puede permitir todos los días; todo el mundo entiende que una vez ocurra, pero yo ya tengo ansiedad de estar todos los días con este tema... Del calor, del sol...".
Reconocen que no es culpa de los conductores, pero necesitan que se refuerce el servicio de autobuses y termine esta situación que está provocando que la gente se encuentre indispuesta al verse obligada a esperar durante tantas horas bajo el sol.