Condenado un ladrón que robó cuatro veces en hospitales de Pontevedra en 24 horas
Por Natalia Puga & Mónica Patxot
Dos años y dos meses de prisión y el pago de una multa de 80 euros. Es la condena que deberá cumplir un ladrón que en el año 2022 causó preocupación en los hospitales Provincial y Quirón Salud Miguel Domínguez tras haber actuado cuatro veces en menos de 24 horas.
El hombre se sentó este martes en el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial de Pontevedra, pero evitó la celebración del juicio tras llegar a un acuerdo con la Fiscalía por el que redujo la condena. Le pedían inicialmente cuatro años de prisión y una multa de 1.080 euros.
La sección cuarta de la Audiencia le condenará con su conformidad por un delito de robo y otro continuado de hurto.
El hombre, que ya cuenta con cuatro condenas previas por delitos de robo en Pontevedra, reconoció los hechos de los que le acusaban, que ocurrieron entre los días 1 y 2 de febrero de de 2022.
El primer hurto que reconoció ocurrió entre las 15:00 del 1 de febrero y las 6:55 horas del día 2 de febrero, cuando al vehículo Citroën C15 de un enfermero del Hospital Provincial de Pontevedra. El coche estaba estacionado en las inmediaciones del hospital sin cerrar con llave y el acusado entró y cogió diversos objetos, entre ellos, una linterna, una mochila y una bata blanca con el nombre Enfermero.
Ese mismo día 2, sobre las 6:55 horas, entró al Hospital Provincial de Pontevedra, violentó varias taquillas de los vestuarios del personal y cogió de una de ellas una cazadora.
El acusado fue sorprendido con posterioridad por el vigilante de seguridad del hospital merodeando por el lugar, vestido con el uniforme de enfermero que había robado la noche anterior.
Horas más tarde, sobre las 11:50 horas del 2 de febrero, también actuó en otro centro hospitalario, el Hospital Quirón Salud Miguel Domínguez, y cogió de un perchero de los vestuarios del personal una chaqueta. Poco después, fue sorprendido en el interior del centro por funcionarios de la Policía Nacional.
Ese mismo día, por la tarde, sobre las 20.20 horas, acudió al aparcamiento del Hospital Provincial y cogió un patinete eléctrico valorado en 200 euros.
Llegó a arrancar el candado que lo protegía, pero no pudo culminar su acción al ser sorprendido en ese momento por agentes de la Policía Nacional. El patinete sufrió desperfectos consistentes en arañazos en el manillar.