Los vándalos arrancan tres magnolios de madrugada de un paseo de Vilagarcía
Por Redacción
La Policía Local de Vilagarcía mantiene abierta una investigación para esclarecer la autoría de un acto vandálico registrado en la pasada madrugada en el paseo exterior de la plaza de abastos. Tres magnolios fueron arrancados y quedaron tumbados en el suelo.
Al margen de la investigacón policial, personal del departamento municipal de Jardines ha previsto examinar los árboles para determinar si dos de ellos que fueron arrancados con algo de raíz pueden ser replantados. El tercero se rompió por la parte baja del tronco, por lo que no es recuperable.
El acto vandálico lo descubrieron, según informó el Concello, los primeros placeros en presentarse este miércoles por la mañana a trabajar en la plaza. Dieron la voz de alarma de que los tres magnolios estaban tirados en el paseo de García Caamaño.
Se trata de los tres magnolios que decoraban la zona peatonal de detrás de la plaza. Aparecieron tumbados en el suelo y una vez que la Policía de con los autores el Concello ha previsto presentar la correspondiente denuncia para que los responsables paguen los gastos de los daños ocasionados y, si procede, exigir otro tipo de responsabilidades.
La Policía Local se personó en el lugar a instancias del responsable de la plaza y levantó atestado de los hechos. Según constataron los agentes, los troncos de los tres magnolios presentaban marcas a la misma altura, presumiblemente de la defensa de un vehículo y también aparecen marcas de rodadas en los parterres.
La Policía descarta que los árboles hayan sido arrancados como consecuencia de un accidente, puesto que, además de que los magnolios estaban separados entre sí bastantes metros, dos de ellos aparecen tumbados hacia un lado y el tercero en el sentido contrario, lo que significaría que después de pasar una primera vez por la zona peatonal, el vehículo dio la vuelta para terminar la faena.
El paseo de García de Caamaño que discurre entre la desembocadura del río do Con y Vista Alegre es peatonal y el acceso de vehículos está restringido exclusivamente a los comerciantes de la plaza de abastos para tareas de carga y descarga. Por esta razón, la barrera de acceso en la confluencia del paso con la calle Valle Inclán, se encontraba bajada por la noche.