Alexandra Vicente, a galega máis fan de Barricada: "Musicalmente me quedo huérfana"
Por Anxo Lourido
Esta fin de semana, o grupo de rock Barricada pon fin á súa carreira musical de máis de trinta anos de traxectoria con dous concertos en Pamplona, a súa cidade de orixe. Alexandra Vicente non podía perderse este momento. Para esta pontevedresa de 34 anos desaparece algo máis que unha banda, desaparece un piar fundamental da súa vida durante as últimas décadas. "Es mucho más que un grupo de música. Somos una familia barriquera" afirma esta moza.
Alexandra Vicente está considerada unha das principais seguidoras do grupo que en 1982 fundou Enrique Villarreal, El Drogas: "Yo sé que Barricada llevan 20 años formando parte de mi mundo. Son el centro de mi mundo en cuestión musical. Me gustan otros grupos pero no como Barricada. Por otros grupos no me muevo así. Si hay un concierto de cualquier otro grupo que me guste en Pontevedra pero hay otro de Barricada en Madrid, me voy sin duda para allá". A súa fidelidade á banda pamplonesa remóntase a cando Alexandra contaba con tan só trece anos: "los conocí a través de mi prima, que me sacaba dos años. Y un día me puso el disco Blanco y Negro, a partir de ahí comenzaron a gustarme. Íbamos a un pub en Moaña en el que ponían un vídeo de Barricada en directo y ahí me acabaron de enganchar".
Pero ata que tivo 19 anos non conseguíu velos en concerto. Lémbrao como un momento máxico: "El primero que les ví fue en Cangas en el Massó. Tocaban Dismal, Motores, Obús y Barricada. Fue el 13 de junio del 98. Tardé en ir a mi primer concierto de ellos porque, entonces, no se movían mucho por aquí". Dende aquel día, sempre que as súas obrigas profesionais llelo permitisen, Alexandra movíase por toda España para acudir a distintos concertos da banda ou para encontrarse con eles: "por ejemplo, fui a Castellón y, cuando llegamos, suspendieron el concierto. Pero cené con ellos. Estuvo bien".
E é que a relación desta moza con Barricada vai máis alá do musical: "En el 98, fuí a un pub que llevaba un amigo que los trataba personalmente y, tras el concierto, me dijo: "¿quieres conocerlos?". Entré en el camerino y fue una caña. Yo temblaba mogollón. No reaccioné. Entré, vi al Drogas allí al fondo con sus melenas y... ÿl estaba más cortado que yo. Todos flipaban mirando para mí porque yo me quedé sentada y me temblaba todo. Me preguntaron: "¿no trajiste la cámara de fotos?". Me la había dejado en el coche pero no fuí capaz de ir a buscarla. Me quedé allí sentada, sin palabras, mirándolos".
A partir daquela noite, Alexandra comezou a entrar nos camerinos da banda en cada un dos concertos aos que acodía: "Lo importante no es cuando yo los conocí a ellos sino cuando ellos me conocieron a mí porque a raíz de eso, ya me presentaba al vigilante y le decía: soy Álex de Pontevedra. Y ya venían a buscarme para que entrara".
Declárase devota dos integrantes da banda pamplonesa ata o punto de que se estableceron lazos afectivos entre a banda e a familia da pontevedresa: "Son geniales, mogollón de agradables. Conocieron a mis padres. Fueron ellos quienes quisieron conocer a mis padres". Y es que las casualidades hicieron que la primera vez que El Drogas entraba en el chat del foro barriquero coincidió con Rosi, la madre de Alexandra. Semanas más tarde, tras un concierto en Lalín, fue el ex cantante de la banda el que preguntó por ella: "¿Y Rosi vino? Yo le dije que sí y él vino a saludarla. Fue genial".
O PRINCIPIO DA FIN
Precisamente, o 2 de decembro de 2011, Enrique Villarreal El Drogas anunciaba que fora expulsado do grupo. Os seus ata entón compañeiros, Boni, Ibi e Alfredo, recoñecían que continuaban o proxecto da banda sen el. Non obstante, a marcha do líder non preocupou aos fans máis fieis: "Después de la salida de El Drogas sacaron Flechas Cardinales y es un discazo. Es 100% Barricada. Cuando comenzaron la gira, en el primer concierto al que fuí tardé en darme cuenta de que El Drogas no estaba en el escenario".
Pero o 1 de outubro deste ano, Boni anunciaba que ía comezar outro proxecto musical e Alfredo confirmaba a disolución definitiva de Barricada. A Alexandra énchenselle os ollos de bágoas cando recorda ese momento: "No me lo esperaba. Es mi grupo de toda la vida. Musicalmente me quedo huérfana".
Por ese motivo, esta pontevedresa que liderou un dos clubs de fans do grupo non quixo perderse a dobre cita deste fin de semana cos últimos concertos da banda. Recoñece que comprou as entradas tan pronto saíron á venda, de xeito compulsivo: "Ni lo pensé. ÿltimo concierto de Barricada, tengo que ir. Fue lo único que pensé". Alí vai atoparse con moitísima xente coa que leva anos conectada a través do chat do grupo: "Va a ser una fiesta. Pero vas a un concierto en el que piensas que es el último de Barricada y, entonces, te hundes", afirma con tristura. Alexandra non cre que, nesta ocasión, poida achegarse aos camerinos: "Me gustaría despedirme de ellos y darles las gracias personalmente pero sé que esta vez va a ser muy difícil".
Co concerto deste sábado, Barricada deixa atrás unha longa carreira de éxitos con 15 álbums gravados e miles de actuacións. Pechan unha porta que para Alexandra quedará selada para sempre: "Yo creo que no van a volver. Van a hacer colaboraciones unos con los otros porque se separan de buen rollo, pero no van a volver a ser Barricada".