'Nichos de negocio', una empresa se dedica a la limpieza de tumbas
Por Oskar Viéitez
Cada vez son menos las personas que visitan con regularidad el cementerio para mantener limpia la tumba de sus familiares fallecidos. La consecuencia inmediata es que, durante la mayor parte del año, las tumbas se encuentran sucias y descuidadas. Esto parece no importar demasiado, salvo cuando llega esta fecha tan señalada y la familia quiere que luzcan limpias y arregladas.
Esta actitud que puede parecer un acto de dejadez o hipocresía, responde más a factores culturales y a las dificultades que tienen ciertas personas para realizar estas tareas.
Con la crisis han surgido nuevos "nichos de negocio", una expresión que en este caso vale para referirse a las empresas de limpieza que ofrecen trabajos puntuales para Todos los Santos, o bien servicios de limpieza y mantenimiento mensuales, trimestrales o semestrales.
Según explican desde la firma Eternalia también dan la posibilidad de colocar flores, velas, y otros adornos. Además cuando finalizan un trabajo envían una foto por e-mail o un mensaje de confirmación al teléfono móvil del cliente. El precio de un servicio de mantenimiento anual básico ronda los 100 euros, que es lo que cuesta limpiar una tumba cuatro veces al año o un panteón familiar dos veces. Pero hay precios para todos los gustos, dependiendo del tipo de enterramiento y de la frecuencia de las limpiezas.