Detenido un joven de 18 años por agredir a su novia de 15, que no quiere denunciarlo
Por Natalia Puga
La Policía Local de Pontevedra detuvo el pasado martes a un joven de 18 años como presunto autor de un delito de violencia de género por agredir en plena calle a su pareja, una menor de 15 años. Después de la agresión, fueron alertados los padres de la chica menor y la familia manifestó que no van a presentar denuncia y que ya lo arreglarían entre ellos.
Todo sucedió sobre las 22.40 horas del martes 17 de agosto en la avenida Buenos Aires y resultó crucial la colaboración vecinal, pues un testigo alertó a la Policía Local de que cuando paseaba por la citada avenida observó cómo una pareja joven estaba agrediéndose. Esta persona escuchó gritos de una joven que pedía que alguien llamase a la Policía.
Una patrulla se desplazó hasta la zona y localizó a la pareja. Los agentes se entrevistaron con un chico y una chica por separado y los dos confirmaron que son pareja sentimental y que, a causa de una discusión, se agredieron mutuamente. Ella lo agredió propinándole varias bofetadas y él le pegó a ella varios puñetazos.
Según relataron, la joven se defendió con patadas y en ese instante el chico le mordió la cara y le dio varios golpes en diversas partes del cuerpo. La chica presentaba varias lesiones visibles en la cara, una marca en la parte izquierda del mentón producida por el mordisco que le propino su novio y sangre en la encía.
Los agentes recogieron varios testimonios que confirmaban el relatado por la pareja, por lo que los agentes procedieron a la detención del hombre, de 18 años de edad.
La mujer es menor de edad, de tan sólo 15 años, de modo que fueron avisados sus padres. Además de negarse a recibir asistencia sanitaria, la familia manifestó que no van a presentar denuncia y que ya lo arreglarían entre ellos.
La Policía Local destaca que la solidaridad y la colaboración ciudadana fue determinante para atajar este delito. Resulta crucial la implicación de la sociedad especialmente en casos como este, donde, tratándose de una menor, la familia manifiesta su voluntad de no presentar denuncia. La acción directa de los ciudadanos en este tipo de delitos, en este caso con su testimonio es imprescindible para que la policía actúe de oficio y pueda proceder a la detención de esta persona y ponerla a disposición judicial.