Se hace pasar por discapacitada para aparcar a la puerta del trabajo
Por Natalia Puga
La Policía Local de Pontevedra ha denunciado a una mujer de poco más de 20 años por uso abusivo e indebido de las plazas de estacionamiento reservadas para conductores o personas con discapacidad. Constataron que no tiene ninguna discapacidad y, pese a todo, aparcaba a diario en una plaza específica de la calle Augusto González Besada. Para ello, usaba la tarjeta de un vecino de Barro.
Según fuentes policiales, una vecina de Pontevedra se puso en contacto con la Policía Local para 'chivarse' de que una joven aparcaba prácticamente a diario en una plaza para discapacitados y no llevaba a nadie en el coche ni parecía tener una discapacidad física.
Tras recibir la denuncia, la Policía realizó un seguimiento entre los días 25 y 27 de este mes para constatar si efectivamente realizaba un uso indebido de estas plazas reservadas. El primer día la localizaron estacionando y sin llevar acompañante. Tras dejar el coche, se dirigió a un portal en el que trabaja, salió dos horas y media más tarde y se dirigió a la carretera de Vilagarcía. Al día siguiente repitió comportamiento y el día 27 al no encontrar plaza en Augusto González Besada estacionó en Palamios, también en una plaza para discapacitados.
Tras constatar este comportamiento indebido durante tres días, la Policía Local consideró acreditado que hacía un uso indebido y abusivo de estas plazas limitadas de estacionamiento, llamó a la grúa para que retirase el vehículo y le impuso tres denuncias por estacionamiento indebido y uso indebido de una tarjeta para discapacitados.
Por cada una de las denuncias la conductora será sancionada con 200 euros, además de tener que asumir el coste del enganche de la grúa. En cuanto a la persona titular de la tarjeta, un hombre de Barro, se enfrenta ahora a una propuesta de retirada de este derecho que se otorga a las personas con discapacidad.
Este tipo de uso indebido de las plazas reservadas para estacionamiento de personas con discapacidad no es muy frecuente en Pontevedra, donde lo habitual es respetar los aparcamientos específicos, unos 90 en la ciudad. En 2012, hubo 390 denuncias por estas infracciones, el 3,4% del total de las impuestas por la Policía Local, y hubo 185 vehículos retirados por este motivo.