Facebook, aliado de la Guardia Civil para socorrer a un vecino de Forzáns
Por Natalia Puga
La llamada de alerta de un familiar y la diligente actuación de la Guardia Civil han permitido este martes socorrer a un vecino de Ponte Caldelas de 53 años que estaba sufriendo un ataque de ansiedad grave en su casa de la parroquia de Forzáns, en la que vive solo. Tras este servicio humanitario, el protagonista ya se recupera en un centro hospitalario.
Todo ocurrió sobre las 19.30 horas de este martes. Un vecino de Barcelona habló por teléfono con su tío que vive en Ponte Caldelas y lo encontró en un evidente estado de nerviosismo, de modo que se preocupó e incluso temió por su vida, más teniendo en cuenta que su familiar tiene antecedentes por episodios depresivos. Dada la distancia, a él le resultaba imposible ir a comprobar en persona cómo estaba, así que optó por solicitar ayuda a la Guardia Civil.
El joven barcelonés telefoneó a la Comandancia de Pontevedra y contó que, entre otros síntomas, su tío tenía dificultades para hablar. Les facilitó su identidad completa y el teléfono móvil, pero no supo darles la dirección, tan sólo que vivía en Ponte Caldas, de modo que el Centro Operativo De Servicios (COS) se puso a trabajar para sortear ese inconveniente de falta de información detallada sobre cómo dar con él.
Los agentes pontevedreses intentaron llamarle por teléfono, pero no lo lograron, de modo que tiraron de ingenio, echaron mano de los recursos que tenían disponibles y acabaron recurriendo a la red social Facebook, en la que tiene un perfil el hombre al que buscaban. Atando cabos, averiguaron que tenía relación con un bar de la parroquia de Forzáns, se pusieron en acción y una patrulla se trasladó al lugar.
La pista resultó determinante, pues el responsable del bar les indicó su dirección y se dirigieron rápidamente a la casa. Allí pudieron comprobar el evidente estado de nerviosismo que presentaba. De hecho, incluso les abrió la puerta con un cuchillo en la mano. Dada la situación, alertaron a los servicios sanitarios y el hombre fue trasladado en una ambulancia a un centro santario.
Además de tener un final feliz, el servicio humanitario realizado fue rápido, pues entre la llamada inicial del sobrino hasta que los agentes llegaron a la casa del tío apenas transcurrieron 35 minutos. A las 20.05 horas de este martes ya estaba en compañía de los guardias civiles que le socorrieron y evitaron cualquier posible incidente.