La plantilla relaciona el cierre de Tafisa con el final del compromiso de la empresa con el Concello de Pontevedra
Por Anxo Lourido & Mónica Patxot
"Creemos en la viabilidad de la fábrica de Ponte Caldelas", así de contundentes se mostró el presidente del comité de empresa de Tafisa, José Manuel Moledo, en la rueda de prensa que realizó durante la mañana de este 21 de mayo en compañía de otros compañeros del comité y los secretarios comarcales de UGT, CIG y CC.OO.
Moledo mostró su desacuerdo con la cifra de 9,7 millones de pérdidas que emplea la empresa para justificar el cierre de la factoría señalando que "este mes entraríamos con números positivos y desde enero la tendencia era ascendente en ventas y beneficios. Los 9,7 millones de perdidas que declara la empresa no nos los creemos. En diciembre de 2010 habíamos ganado 1.095.000 euros. En diciembre de 2011 y 2012 las pérdidas fueron de 920.000 euros y en 2013 se barajaba una cifra similar, pero este año las cosas apuntaban a una mejora". Los representantes del comité indicaron que la plantilla siempre accedió a aceptar el ERE que les planteó la empresa y cada trabajador lleva gastados 11 meses de prestación del desempleo con la intención de "salvar esta empresa".
Moledo destacó el impacto que el cierre de Tafisa tendría en la provincia porque "en repuestos, proveedores y empresas locales gastamos alrededor de un millón de euros anuales y las materias primas que se adquieren de otras empresas de Sonae alcanza los 10.500.000 euros al año".
Los secretarios comarcales de CC.OO., CIG y UGT, José Luis García Pedrosa, Marcos Conde y Ramón Vidal, incidieron en que esta decisión empresarial se produce cuando se cumple el plazo de diez años del convenio firmado con el Concello de Pontevedra en el que se comprometían durante ese período de tiempo a mantener la actividad de Tafisa en la comarca. "Aquí o que vai facer é culminar unha estafa aos traballadores e á cidadanía de Pontevedra", aseguró García Pedrosa.
Los representantes sindicales indicaron que la intención de la empresa es trasladar la producción a Alemania y que la empresa están copiando el sistema de trabajo que realizaban en Ponte Caldelas para desarrollarlo en las fábricas de allá.
Los sesenta trabajadores de la empresa cuenta con una media de edad próxima a los 50 años con 20 de antigüedad en la fábrica, que durante estos días está trabajando con normalidad. Miembros del comité calculan que de la actual plantilla apenas 20 trabajadores podrían ser recolados en las fábricas de fibras que Sonae tiene en Betanzos o en Valladolid.
Para intentar evitar el cierre, a partir del 27 de mayo los trabajadores iniciarán una huelga indefinida en la nave de Ponte Caldelas y el 28 tienen previsto convocar una manifestación por el centro de Pontevedra. En los siguientes días llevarán a cabo otras protestas ante la sede de Sonae en Maia (Portugal) y en Madrid. Además, el comité de empresa continuará manteniendo entrevistas con autoridades. Este jueves se reunirán con el alcalde de Pontevedra, el viernes los recibirá el presidente de la Deputación y ya han solicitado una entrevista con el conselleiro de Industria.