A la décima no pudo ser y el Caudal evita la "vuelta perfecta" del Pontevedra en Pasarón (0-0)
Por Ramiro Espiño & Diego Torrado
La "vuelta perfecta" se rompió en el último partido del año en Pasarón. El Pontevedra, que llevaba nueve victorias seguidas, se estrelló contra un Caudal Deportivo serio en defensa, que supo marcar el ritmo que le convenía, hasta el punto de convertirse en el equipo al que menos ocasiones de gol pudo crearle el cuadro local.
Cierto que el Pontevedra, por jugadas de peligro mereció y pudo ganar, pero no acertó en esas apenas cuatro oportunidades claras, y el Caudal se llevó un punto que tampoco se puede considerar inmerecido, por su correcta lectura del juego y perfecta ejecución de un planteamiento basado en mantener el balón, aún a costa de renunciar casi por completo a llegar al área granate.
Poco fútbol en un primer tiempo marcado por las imprecisiones y errores en los pases, sin un claro dominador. Comenzó mejor el Pontevedra, que de hecho dispuso de la primera oportunidad clara en una falta lateral que lanzó Mouriño y remató de cabeza Bruno, obligando a Busmann a emplearse a fondo para mandar el balón a corner.
Luego los granates se fueron diluyendo en su dominio inicial, un tanto perdidos en la superioridad que acumulaba el equipo asturiano en la zona ancha, dos líneas defensivas muy compactas, tres centrales y dos carrileros que apenas se proyectaban, y cuatro centrocampistas que superaban en número a los locales, con Gonzalo y Abel para intentar construir, pero David Añón y especialmente Mouriño, caído a la banda izquierda, que apenas participaba.
La consecuencia fue que, sin crear peligro ni disparar a puerta más que una vez, desde lejos y fuera, el Caudal ganaba terreno, consiguiendo defender lejos de su área.
Así fueron pasando los minutos hasta que superada la media hora el Pontevedra dio un pequeño paso adelante, puso algo más de velocidad en la circulación de pelota y pudo sacar provecho. Avisaría Abel, con un disparo desde la frontal que se fue arriba, aunque la mejor ocasión de largo llegó en una excelente jugada iniciada por el mismo Abel, que Mario Barco prolongó metiendo un gran balón a la espalda de la defensa, donde Mateu apareció sólo, pero estrelló el remate en los pies del meta asturiano.
El descanso llegó como un alivio para los visitantes, que empezaban a sufrir ante el empuje local. Y siguieron sufriendo al comienzo de la segunda parte, pero durante poco tiempo. Luisito buscó mayor profundidad por la banda y dio entrada a Álex González, que aportó velocidad y desborde, pero no era el día. Sus compañeros enseguida volvieron al tono gris, lento y apagado de casi todo el partido, permitiendo que los asturianos volviesen a respirar, no sin un susto en una volea de Mario Barco, a la salida de un corner, que salió alta.
Luego poco menos que nada. El Caudal se manejaba con soltura atrás, pero sus incursiones en terreno hostil eran anecdóticas, fiando su suerte a mantener el portal a cero, alguna acción aislada a balón parado y a la falta de inspiración granate. Todo les salió bien, excepto que convirtieron a Edu en un mero espectador que no recibió ni un sólo disparo entre los tres palos, o mejor, uno, pero anulado por fuera de juego previo.
Incapaz de imponer un ritmo alto, el Pontevedra fue cayendo en la red tejida por Iván Ania, que con sus tres centrales supo tapar los centros laterales y apenas permitió opciones de remate a Mario Barco y Mateu. Ni siquiera cuando entró Jacobo para intentar enganchar con los puntas, cambiando de sistema, el Caudal pasó apuros serios.
Así fueron discurriendo los minutos, con los asturianos echando mano del "otro" fútbol, sin sobresaltos, hasta una última oportunidad para hacer saltar la muralla astur. Sería a falta de dos minutos en un balón de Abel para Miki, sustituto de David Añón, lesionado, que tapó perfectamente el meta Busmann.
El resto queda para la historia. 28 puntos de 30 posibles en Pasarón son sinónimo de una primera vuelta sensacional que no puede empañar un pequeño borrón, aunque deje un cierto regusto amargo antes de las vacaciones navideñas.
PONTEVEDRA CF (0): Edu; Miguel, Jacobo Trigo, Bruno, Bonilla; David Añón (Miki, minuto 83), Gonzalo, Abel, Mouriño (Álex González, minuto 46); Mateu (Jacobo, minuto 70) y Mario Barco.
CAUDAL DEPORTIVO (0): Busmann; Pelayo (Iván, minuto 56), Cristian, Alberto, Colo, Noel Alonso; Jaime, David, Richard, Javi Sánchez (Anunciata, minuto 82); y Braulio (Rony, minuto 76).
Árbitro: Alfonso Vicente Moral (Castilla-León), auxiliado en las bandas por Javier Gómez Gago y Marcos Sánchez Polo. Amonestó a Miguel, Mouriño y Mario Barco, por el Pontevedra, y a Pelayo, Javi Sánchez, Iván, David y Colo, por el Caudal Deportivo.
Incidencias: Estadio Municipal de Pasarón. Unos 3.000 espectadores. Se guardó un minuto de silencio en memoria del presidente del Racing de Ferrol, Isidro Silveira Cameselle.
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