"El compostaje tiene que ser una apuesta generalizada. El futuro va por ahí"
Pepe y Marisa tienen desde hace más de un año un compostero individual en la huerta de su casa en Vilaboa. Aseguran que decidieron apostar por el compostaje por una cuestión ambiental, porque piensan que el futuro debe ir por esa vía para tratar la basura, y aplauden la iniciativa del Ayuntamiento de Vilaboa y de la Deputación de Pontevedra de poner a andar el Plan Revitaliza. Ahora puede decirse que son unos expertos en el compostaje. En una conversación con ellos demuestran que compostar no da trabajo ninguno, no origina molestias y supone un beneficio para todos: “es tan sencillo como querer”, aseguran.
Llega un día y deciden no tirar más su basura orgánica al contenedor verde y optan por compostar. ¿Por qué?
PEPE: Nosotros estábamos interesados por el compostaje desde hace tiempo. Pero nos costaba empezar. Habíamos visto composteros por internet, el tema de compostar con lombrices, pero no sabíamos cómo... Un día leí en el periódico que la Deputación estaba trabajando en el tema y que se estaban repartiendo composteros. Fuimos al Ayuntamiento a preguntar y allí nos explicaron que se iba a hacer una reunión. Me preguntaron si quería apuntarme y dije que sí. De esto hace más de un año.
MARISA: En aquella reunión no había composteros para todos, y nosotros entramos en la segunta vuelta, tuvimos que esperar...
¿La motivación para participar en el compostaje es ambiental?
PEPE: Hombre claro. El cambio climático ahí esta.
MARISA: Ahí lo tenemos.
PEPE: Nosotros a los hijos les intentamos inculcar que el cambio climático es un hecho. Lo que hacemos nosotros es un grano de arena en medio del mar, pero nosotros contribuimos en nuestra pequeña parte. Que el ayuntamiento se sume a una iniciativa como la de la Deputación es muy positivo, porque aunque el nuestro sea un grano de arena, nos gusta que después haya una palada, después un cubo, después un tractor... Tiene que ser una apuesta generalizada porque el futuro va por ahí.
¿Qué dificultad supone compostar en casa?
PEPE: Ninguna. Nada de dificultad.
MARISA: Nosotros tenemos un cubo debajo del fregadero para el orgánico y otro cubo para los plásticos. A medida que vamos llenando la bolsa del orgánico la llevamos al compostero en lugar de al contenedor. Esa es la única diferencia. Después la bolsa va a los plásticos en el contenedor amarillo. También separamos el cartón, que gastamos poco, y las botellas. Además, tenemos el que se lleva al contenedor verde, pero eso va cada dos semanas, porque son cosas del baño -productos de higiene de la abuela- o de barrer. A veces incluso pasa más tiempo para llevarlo.
¿Colaboran todos en casa?
PEPE: El volumen de basura en casa es bastante. Éramos cinco. Ahora la hija está en la universidad y el chaval acaba de independizarse hace un mes, pero viene todos los días a comer, así que también contribuye. Menos la abuela, que es mayor y hay que estar pendiente de ella, los demás contribuimos todos. Hombre.... El crío incluso quería traer la basura de Pontevedra para aquí.
MARISA: Quería incluso traer el vidrio y los plásticos y nosotros le preguntamos... ¿pero tú no tienes contenedores para echarlo donde vives? Él está en Monte Porreiro, donde llevan tiempo instalados los composteros comunitarios, y nosotros le dijimos que aunque no fuera al compostero comunitario con la basura orgánica, el vidrio y el cartón lo puede dejar en Pontevedra.
¿Piensan que la concienciación de separar y reciclar es general?
MARISA: Mucho problema es la comodidad. Pero no solo para la gente joven. Hay gente en el rural que siega el césped y lo echa en el contenedor verde... Aquí pasa, en una aldea, y el césped se descompone solo. ¿Cómo puede la gente echar el césped en el contenedor? ¡Hay veces que está a tope!
PEPE: A los críos les cuesta. Por mucha educación que haya en los colegios, no llega. No hay cultura en general de reciclar y aprovechar, y en las aldeas, peor. Eso de separar, de ir allá abajo a echar la basura separada. Lo de separar... Piensan que por un plástico que no vaya a su sitio no pasa nada.
¿Ustedes necesitaron mucha formación y personal técnico para compostar?
MARISA: Es bueno que haya personal técnico para asesorar, porque muchas veces nosotros estamos compostando de una manera y no es así. Ellos te dan consejos sobre la mejor manera de hacer las cosas, o si aparece algún problema... Que no hay gusanos, que hay gusanos, que hay algún olor... Pues nosotros hablamos y preguntamos en las reuniones que hicimos en la escuela. Allí una vecina explicaba que le habían aparecido moscas... Es bueno hacer una reunión de vez en cuando para exponer los problemas que tenemos cada uno, nuestras experiencias para mejorar... Pero si las cosas se hacen bien no tiene que haber problemas.
PEPE: Lo importante del asesoramiento y del soporte técnico es que esté ahí sobre todo en el inicio, cuando comienzas a hacerlo. Yo ahora voy casi todos los días al compostero, lo tenemos en la huerta y es casi paso obligatorio, y es una cosa que no da trabajo ni molestia ninguna.
¿Ustedes son conscientes del coste real que supone la gestión de la basura para los ayuntamientos?
PEPE: La tasa en Vilaboa viene compartida con otros conceptos, y son unos 50 euros al año... Lo que nos dijo el concejal en una reunión que tuvimos es que absorbe casi lo que se recauda por los coches y demás impuestos. Es una pasada.
Pues cada tonelada de basura, por recogida y tratamiento, cuesta un promedio de entre 180-190 euros en la provincia...
[Silencio]
MARISA: Eso es una pasta.
PEPE: Pues aquí tenemos un buen servicio. Yo lo reconozco. Tenemos un muy buen servicio, por lo menos en Vilaboa. El contenedor verde antes era de recogida todos los días... Todos los días. Y estaba ahí el contenedor y estaba siempre desbordado, con cosas por el suelo. Ahora recogen todo. Cualquier cosa que dejas la recogen. Es una maravilla.
MARISA: Pero también es cuestión de la gente. Aún hoy fuimos a dar un paseo y encontramos cosas tiradas por ahí. Lo triste de todo esto es que como venga la Policía Autonómica o Medio Ambiente, la persona dueña de la finca va a ser denunciada y pagará una multa. Había hasta una alambrada allí enroscada que debía ser la cerca de algún sitio... Y la plantaron allí.
¿Creen que el compostaje realmente compensa como modelo de gestión de la basura?
MARISA: Claro que sí. Por lo que hablamos de conciencia ambiental, de que permitiría recoger menos veces el contenedor verde...
PEPE: Sí. En la ciudad igual no es tan viable porque no hay donde poner el compostero privado o comunitario. Al mejor en el centro no es tan posible. Pero en un ayuntamiento como Vilaboa, que es muy aldea, creo que sí.
¿Piensan que los vecinos colaborarán cuando se implante en Vilaboa?
PEPE: Hay una fórmula. Pagar. O bien se disminuye la tasa al que hace el compostaje, o bien se incrementa al vecino o vecina que no la hace. Que lo pague. ¿Cómo quieres hacer? ¿Pagar? Pues si ahora pagas 50, pagarás 150. ¿Que no tienes? Pues composta. Creo que no entendemos de otra manera. Y nosotros estamos orgullosos de que Vilaboa sea un ayuntamiento pionero en la provincia en aplicar esto. Claro que sí. Sabemos que pagar tenemos que pagar, porque el contenedor verde y los demás también los utilizamos. Tenemos que pagar algo. Es normal. Pero hay que ir a la fórmula de que pague más quien no colabore.
¿Qué le dirían a la gente que sólo ve problemas en el compostaje? Moscas, olores, animales...
PEPE: Que si hay algún problema son cosas solucionables. Son pequeñas cosas.
MARISA: Pues sí, que si tienes algún problema es algo pasajero, será unos días, pero nada más.
PEPE: Pero si hay moscas sólo es en verano y se soluciona tan fácil cómo echándole un poco de seco. Poco a poco vas descubriendo qué hacer y vas preguntando. No es más.
¿Ya tuvieron su primer compost?
PEPE: El año pasado ya tuvimos. Y lo hicimos de una forma. Este año lo hicimos de otra intentando mejorarlo y sacándolo más selecto, más tamizado, más finito. El anterior tenía unos trozos más gruesos. Ahora lo tamizamos. No es que seamos expertos, pero vamos mejorando... Y lo utilizamos en nuestra huerta. No creo que haya mucha diferencia en cómo crecen las plantas porque todo el mundo echa abono...
MARISA: Pero estamos contentos y satisfechos con la iniciativa porque cuando plantamos utilizamos nuestro compost.
¿Queda todo en casa, pues? ¡Los productos de casa con compost de casa! Un claro ejemplo de economía circular...
MARISA: Sí, es verdad. Todo hecho en casa. Los productos de la huerta y el compost para abonar.
PEPE: Estas cosas... Es tan sencillo como querer. Tener voluntad. Si tienes la voluntad de hacerlo y lo haces con cariño el trabajo no es ninguno. Es como otra cosa cualquiera: barrer la cocina da trabajo. Pero el compostaje no da trabajo, no lleva tanto tiempo.
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