El ORAL permitirá fraccionar los recibos en 8 cuotas sin coste alguno
Por Redacción
El organismo de gestión tributaria de la Deputación de Pontevedra, el ORAL, acaba de activar un plan de facilidades de pago para el contribuyente que permitirá fraccionar en 8 cuotas sin intereses los recibos del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), de Actividades Económicas (IAE) y de Circulación de Vehículos.
Trata de una medida que, tal y como señaló el presidente de la Deputación, Rafael Louzán, en la rueda de prensa de presentación de esta iniciativa, pretende "dar máis facilidades aos cidadáns á obra de cumprir coas súas obrigas tributarias", especialmente en una provincia en la que el 90% de los contribuyentes paga sus recibos en período voluntario, demostrando que se trata "dun contribuínte exemplar e modélico".
Este sistema "xusto e necesario" se suma a los dos procedimientos que ya existían, como el fraccionamiento ordinario, que permite que el contribuyente fraccione sus recibos pero que tiene el inconveniente de que implica el pago de unos intereses que, aunque son mínimos, sí suponen un añadido al coste del recibo; y el sistema especial de pago del IBI, que permite pagar en dos plazos, en este caso sin ningún tipo de interés.
Los contribuyentes que deseen acogerse a este sistema para el presente ejercicio fiscal de 2014 podrán hacerlo durante lo que resta de mes y también en febrero. Una vez solicitado el plan personalizado, no tendrán que renovar la solicitud y se le aplicará este fraccionamiento en todos los ejercicios mientras el contribuyente no ordene lo contrario.
Los recibos se pasarán al cobro a principios de cada mes y el cálculo de las cotas se hará sumando la cuantía total de los recibos que se quieran fraccionar y dividiendo la cantidad resultante entre 8.
Podrían entrar dentro de este sistema de pago más de 700.000 recibos
Para poder acogerse a este plan, la cuantía total de los recibos agrupados no podrá ser inferior a los 240 euros, por lo que la cuota mensual será de un mínimo de 30 euros.
El plan establece, además, y con el objetivo también de darle facilidades al contribuyente que si en algún momento no se puede pagar una mensualidad, pueden seguir pagándose, las restantes cotas con normalidad y abonar la cota pendiente cuando el contribuyente pueda. De no abonarse antes, se le cobrará en la última mensualidad, sin ningún tipo de recargo.
Según los datos facilitados por Louzán podrían entrar dentro de este sistema de pago más de 700.000 recibos, con un importe total que ronda los 100 millones de euros y pertenecientes a más de 430.000 contribuyentes.