El cloruro de etilo o cloretilo es un anestésico local muy habitual en medicina deportiva. En el mercado se comercializa en spray y con ellos se tratan lesiones musculares, contusiones, distensiones, calambres, luxaciones, etc. Sin embargo, desde hace unos años se viene detectando que estos "sprays fríos" se están utilizando entre jóvenes para otros fines muy diferentes. Los adquieren como sustancia tóxica que inhalan y les producen efectos como excitación o euforia.
Hay comunidades autónomas que detectada la situación, ya activaron las correspondientes alertas. Aquí en Pontevedra, es una circunstancia que ha suscitado preocupación en algunas oficinas de farmacia y que han trasladado al colegio profesional; aunque desde dicha instancia ni han confirmado ni desmentido estos hechos cuando han sido requeridos al respecto por PontevedraViva.
También al parecer, en algún que otro centro deportivo, estos sprays están ahora "bajo llave" tras comprobar que su uso estaba aumentando de forma considerable.
En las Conversas na Ferrería de PontevedraViva Radio, hemos reunido a tres profesionales de farmacia, enfermería y medicina. Carmen Abeledo, coordinadora de Enfermería del Centro de Salud de A Parda; Manuel Martín, médico de Atención Primaria y portavoz de la Plataforma en Defensa de la Sanidade Pública y Marta Samartín, farmaceútica y nutricionista. Con ellos abordamos este problema que puede tener consecuencias tan graves como un coma o una muerte súbita.
Este compuesto, el cloruro de etilo, comercializado como cloretilo o con otras marcas comerciales, pero entre los que se encuentra el cloruro de etilo entre sus componentes, no es el único medicamento que los jóvenes utilizan como sustancia dopante, también se ha detectado en el caso de los broncodilatadores, como puede ser el conocido "Ventolín". Aunque en este caso y a diferencia de los primeros, es necesaria la receta médica. Precisamente esta circunstancia, ha hecho que algunos profesionales sanitarios demanden que se requiera una prescripción facultativa para ser vendidos en farmacias.
Por el momento, no se han detectado ingresos en Urgencias debido a estas inhalaciones; sí como ya es sabido por ingesta de alcohol. En este último caso, el Hospital Alvaro Cunqueiro de Vigo, sí que ha recibido más de un caso de coma etílico, pero no por la ingesta oral de alcohol, sino consecuencia de otra "moda" entre los jóvenes: la de empapar tampones en alcohol e introducirlos anal o vaginalmente.