Los trabajadores de ENCE aceptan 11 bajas incentivadas y prejubilaciones en Lourizán
Por Redacción
La asamblea de trabajadores de la fábrica de ENCE en Lourizán ha dado el visto bueno a la negociación mantenida entre el comité de empresa y la Dirección y ha aceptado que se eliminen 11 puestos de trabajo en la fábrica de Lourizán. Estos empleos no serían despidos, sino bajas incentivadas para mayores de 58 años y prejubilaciones.
El acuerdo recibió el respaldo de 71 de los 95 trabajadores que votaron en la asamblea, pero está pendiente de cumplir dos condiciones. La primera es que los 11 trabajadores afectados acepten de forma voluntaria la oferta que les haga la empresa. La segunda va más allá, hasta la fábrica de ENCE en Navia (Asturias), pues los comités de empresa de todas las factorías pactaron que el acuerdo con la empresa solo iría adelante si lo respaldaban todos los trabajadores.
Así, en Huelva y Pontevedra ya se han votado las nuevas condiciones del plan de reestructuración de la empresa y se han aprobado, pero en Navia la asamblea de trabajadores no se celebrará hasta este viernes 5 de julio. En principio, en Lourizán confían en que sí se de el visto bueno al acuerdo, pero hasta que se celebre la votación no habrá nada definitivo.
Si en Navia se ratifica, el plan de reestructuración seguirá su curso y la empresa empezará a negociar las condiciones de su marcha con los once trabajadores afectados, la mayoría de ellos de la parte administrativa y de delineación, y también habrá un plazo de 15 días para que los empleados que quieran acogerse a la prejubilación o baja incentivada lo comuniquen.
El comité rechazó cualquier reducción de la plantilla que afectase a departamentos como energía o digestión al considerar que son vitales para el funcionamiento de la fábrica. En cuanto a los 11 afectados, señalan que "non nos gusta que se toque a ninguén, pero son o menos malo". A medio plazo podrían llegar a verse afectados otros cuatro trabajadores del parque de maderas, pero esta reducción de personal está supeditada a una mejora en la maquinaria que la empresa aún no ha realizado y siempre deberá tener la aprobación de la asamblea de trabajaores.
Con este acuerdo se reduce sustancialmente a afectación inicial a la plantilla propuesta en el ERE presentado por la empresa, que suponía 39 despidos en Lourizán.