Prefieren pasar seis meses en prisión que pagar una multa
Por Oskar Viéitez
Vanessa, Ivana y David admitieron haberle robado la cartera a una enfermera en el centro de salud vilagarciano de San Roque y que trataron de vaciar su cuenta bancaria.
Las letradas de la defensa y el fiscal alcanzaron un acuerdo de conformidad, en virtud del cual a cambio de reconocer la autoría de un delito continuado de estafa se les rebajó la petición de pena de cuatro años de cárcel y una multa de siete euros diarios durante diez meses a una condena de seis meses de prisión que podía ser sustituida por el pago de una multa, una opción que no quisieron.
Que los acusados prefiriesen ir a la cárcel sorprendió a las magistradas de la Sección Cuarta de la Audiencia de Pontevedra que repreguntaron a las letradas que ejercían la defensa si ese era el deseo de sus clientes. Igual asombro causó al fiscal esta decisión tan poco habitual.
Los tres acusados admitieron que en febrero del 2011, aprovecharon un descuido de la enfermera para sustraerle la cartera de su bolso, que estaba colocado en el interior de una vitrina de la consulta de pediatría. En ella, la víctima portaba su documentación personal.
Varios días más tarde, se dirigieron a una sucursal del BBVA en Vilagarcía y utilizaron los documentos de la enfermera para extraer de su cuenta corriente personal seiscientos euros, previa simulación de la firma de su víctima.
Cuatro días después, las mismas dos personas trataron de repetir la operación, elevando la cantidad requerida a mil euros. En esta ocasión, sin embargo, quien les atendió estaba prevenido y no les entregó el dinero.