Condenado un arousano que enviaba cocaína oculta en quesos a Huesca
Por Natalia Puga
Un vecino de A Illa de Arousa de 41 años y otro de Benasque (Huesca) de 48 deberán cumplir tres años de prisión por un curioso método de tráfico de cocaína: enviaban la droga entre la tierra de uno y del otro oculta entre mercancía legal y, en concreto, en medio de quesos que habían vaciado para posibilitarlo.
Los dos acusados alcanzaron un acuerdo de conformidad con la Fiscalía por el que evitaron ir a juicio y la sección segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra dictó una sentencia condenatoria por un delito contra la salud pública en la que se establece que ambos podrán eludir el ingreso en prisión a condición de que no vuelvan a cometer ningún delito en el plazo de dos años y se sometan a un tratamiento de deshabituación del consumo de drogas.
Ambos reconocieron, por lo tanto, los hechos, investigados por el Grupo de Tráfico Medio de Estupefacientes de la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía en Pontevedra.
El vecino de A Illa de Arousa asumió que se dedicaba a la comercialización de distintas partidas de cocaína "disimulada en paquetes postales de mercancía" y se lo enviaba al otro acusado desde una empresa de mensajería en Vilagarcía hasta Benasque.
El 21 de diciembre de 2017 le envió como "Urgente 14" un paquete con una centolla y tres quesos que la Policía Nacional intervino antes de su entrega. Cada queso estaba dentro de una bolsa plástica cerrada herméticamente mediante calor, de las que habitualmente se utilizan para embolsar al vacío los alimentos, sin bien ninguno de los productos estaba envasado realmente al vacío.
Habían vaciado parcialmente de el contenido de los quesos por la parte inferior y habían introducido un paquete envuelto en film plástico de color marrón con cocaína. En total, había 200,75 gramos de cocaína con una pureza del 53,56% y un valor en el mercado ilícito de 14.775,5 euros.
Los policías, tras intervenir el paquete y comprobar su contenido, simularon su entrega y comprobaron que en Benasque lo recogía el otro acusado. Le detuvieron al salir de la oficina tras haberlo recogido.
Ambos acusados están iniciando un tratamiento de deshabituación en relación con el consumo crónico de sustancias estupefacientes y, en el acuerdo con la Fiscalía, asumieron el compromiso de acreditar el efectivo sometimiento y continuidad del tratamiento.