Raxó y San Salvador encabezan el techo histórico de habitantes de Poio
Por Redacción
El techo histórico de 17.230 habitantes que alcanzó el Concello de Poio es en parte gracias a las parroquias de Raxó y San Salvador, representando en mayor medida el crecimiento del municipio desde hace más de dos décadas.
El alcalde, Luciano Sobral, señaló que "los datos demuestran que Poio es un lugar en el que la gente quiere vivir y echar raíces para disfrutar de una inmejorable calidad de vida".
Un año más, San Salvador marca el tope de habitantes en lo que a parroquias se refiere. Según los datos que figuran en el Instituto Nacional de Estadística (INE), en el año 2021 alcanzó las 7.667 personas, lo que se traduce en 88 más con respeto al recuento del ejercicio anterior. Se trata de todo un récord ya que "en 2011 San Salvador no llegaba a los 7.000 habitantes", añadió Sobral.
También forma parte de este crecimiento significativo la parroquia de Raxó, que en 2021 llegó a los 1.197 habitantes. Eso supone un incremento de 58 personas empadronadas y consolida la tendencia al alza marcada desde 2017.
Por su parte, Samieira experimentó un incremento de 13 nuevos habitantes mientras que Combarro apenas experimenta cambios, con solo dos bajas. San Xoan, en cambio, continúa muy por encima de los 5.000 habitantes, concretamente con 5.333.
En cuanto a la media de edad, los datos del INE indican que el 50,4% de los habitantes tienen menos de 44 años. En este sentido, Poio y Soutomaior son los únicos Concellos de la comarca de Pontevedra que están por encima del 50% en esta franja.
Esta serie de datos son para el Gobierno local "positivos" y consideran que son fruto de la "calidad de vida, de los servicios, del dinamismo social, comercial y económico del que disfruta Poio" gracias a la "política de congelación de tasas y la aplicación de nuevas bonificaciones en materia de vivienda, reducción de emisiones de gases y plusvalías hacen que el municipio continúe en una senda muy positiva y sea uno de los Concellos más atractivos de las Rías Baixas para vivir", concluyen los dirigentes municipales.