Intensa agenda privada de Don Felipe en Pontevedra: comida con Feijóo, cena con antiguos amigos...
Fue imposible fotografiarle por el excesivo celo de su personal de seguridad, pero eso no impidió que la presencia del Príncipe de Asturias en Pontevedra fuese de todo menos secreta. Ya solo todo el revuelo montado en el entorno del Parador de Turismo levantó las suspicacias de muchos pontevedreses. Don Felipe había elegido de nuevo la ciudad, 'su ciudad' durante varios meses hace ya 25 años, para descansar en sus dos días de viaje oficial a Galicia.
Su único acto público fue su visita a la fábrica viguesa de Citroen. Acompañado, entre otros, por el ministro de Industria, José Manuel Soria; el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo; o el presidente del grupo PSA, Philippe Varin, acudió a sus instalaciones con motivo del lanzamiento del nuevo monovolumen C4 Picasso y de la implantación de la plataforma modular eficiente EMP2.
Don Felipe saludó y charló con algunos trabajadores, a quienes manifestó su satisfacción por la la planta que, según dijo, encontró "muy cambiada" desde su última visita, cuando se lanzaron las furgonetas Berlingo. El Príncipe de Asturias probó además uno de los nuevos coches. Fue en ese momento, subido en él, cuando los periodistas le preguntaron por la salud del Rey, a lo que respondió simplemente alzando el puño con el dedo pulgar hacia arriba.
Poco después de esa visita, Don Felipe regresó a Pontevedra. Fuentes próximas a Casa Real confirmaron a PontevedraViva que el Príncipe de Asturias se hospedó en la misma habitación que ocupa siempre que pernocta en el establecimiento. La misma que usan sus padres cuando acuden a la entrega de Reales Despachos a la Escuela Naval de Marín y que él mismo usó tantas veces durante su instrucción.
A partir de ahí protagonizó una intensa agenda privada de la que, pese al secretismo en el que estaba rodeada, han trascendido algunos detalles. Don Felipe recibió la visita del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, con el que disfrutó de una suculenta comida, en la que no faltaron productos de la ría. No fue la única audiencia privada que realizó este jueves. También pasó por el Parador el presidente de Corporación Voz de Galicia, Santiago Rey.
Tras descansar en su habitación, el Príncipe de Asturias salió sobre las nueve de la noche del Parador. Su destino, las instalaciones de verano del Liceo Casino en A Caeira. Allí se había organizado una cena privada. Los invitados, un número muy reducido de personas, eran algunos de sus compañeros de instrucción en la Escuela Naval de Marín, con quienes Don Felipe tenía mucho interés en volver a reunirse.
Lo hizo la noche antes de que le veamos de nuevo en un acto público. Será este viernes en la Escuela Naval de Marín. Acude al recinto militar para asistir a los actos que tendrán lugar con motivo del 25 aniversario de la entrega de despachos a su promoción.