El espíritu navideño pasa de largo del Pleno de Pontevedra
Por Natalia Puga
El espíritu navideño que suele inundar todos los encuentros en estas fechas ha pasado de largo este lunes del Teatro Principal de Pontevedra durante la celebración de Pleno de la Corporación municipal. La sesión, la última del año, duró menos de una hora y dejó dos momentos tensos entre los grupos municipal del PP y el BNG, en los que el líder 'popular', Rafa Domínguez, acusó al gobierno municipal de "atropello democrático" y el concejal nacionalista César Mosquera le llamó "cantamañanas" por la forma en la que ejerce la oposición.
El momento de esta pequeña bronca se vivió apenas unos minutos antes de terminar a raíz de una moción presentada por el PP para instar al Gobierno central a un "incremento significativo" de las partidas presupuestarias destinadas a Galicia y a Pontevedra para el año 2021. A esa moción los grupos que integran el Gobierno local, BNG y PSOE, añadieron una enmienda en la que también se incluyen referencias a los presupuestos autonómicos para el próximo año.
El enfrentamiento entre nacionalistas y 'populares' llegó porque Rafa Domínguez reprochó al Gobierno municipal que actúa de mala fe para "entorpecer la capacidad democrática de la oposición", ya que en la sesión debería debatirse esa enmienda sin que se consultase al PP su modificación y él está en desacuerdo con el nuevo contenido porque de las 181 palabras del texto inicial solo se respetaron 20.
Además, Domínguez critica que se añadieron referencias a los presupuestos autonómicos que impiden que se debata sobre los del Gobierno central porque el PSOE no quiere que se hable de los "peores" presupuestos para los gallegos y el BNG del "ridículo de Ana Pontón" en los mismos. Por su parte, se muestra partidario a abordar ambos presupuestos, pero en dos mociones diferentes.
Los reproches de Rafa Domínguez sentaron mal al alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, que quiso aclarar que "no se impide o debate" y que cuando sí se impedía era durante los gobiernos del PP, pero desde su llegada a la Alcaldía "se debate todo".
Finalmente, Domínguez anunció que retiraba la moción porque el texto que se iba a debatir no lo considera como suyo, pero previamente le respondió también por parte del BNG Mosquera, que le reprochó que no está dispuesto a negociar y le echó en cara: "a vostedes, todo o que sexa defender a Pontevedra lles parece mal".
El PP y el BNG también mantuvieron discrepancias en relación con la otra moción presentada por los 'populares' para la puesta en funcionamiento de un plan de compromiso social que Silvia Junco defendió como necesario para hacer un "esfuerzo extraordinario" que "no deje a nadie atrás" en plena crisis derivada de la covid-19.
Esta moción, que pide que el 10% del presupuesto municipal se destine a servicios sociales, contó con el voto en contra del BNG y el PSOE y la portavoz municipal, Anabel Gulías, explicó que la rechazan porque proponen al PP que se abra una negociación sobre el contenido de la misma durante el proceso de tramitación del presupuesto municipal para 2021, cuyas negociaciones empiezan esta semana.
Gulías propuso al PP que retiren la moción y le tendió la mano a esa negociación, pero Junco rechazó la propuesta argumentando que "no sé en qué entorpece esta moción" para esas posibles negociaciones. Además, echó en cara al Gobierno municipal que "vivimos en realidades diferentes" y citó a la antigua concejala socialista Paloma Castro para argumentar que la política social "no es caridad ni subvención". Cerró con una frase del Papa Francisco
Anabel Gulías aclaró que muchas de las cuestiones que proponen los 'populares' ya figuran en los presupuestos y que otras son competencia de la Xunta de Galicia y resumió la postura del PP con una frase popular: "otra vez, vuelta con la burrita a brincos". La justificó porque el PP siempre dice que apoya todo y luego, "cando se trata de falar, oposición frontal" y porque desde el grupo municipal siempre le salvan la cara a la Xunta.
El Pleno de este lunes, Día de los Inocentes, constató la disolución del organismo autónomo Pazo da Cultura, que gestiona estas instalaciones desde el año 1998, que implicará que el Pazo y el Teatro Principal pasarán a formar parte de los servicios propios del Concello.
Esta disolución contó con el voto en contra del PP porque, según explicó la concejala Pepa Pardo, están en desacuerdo con las "formas inadecuadas" usadas por el Gobierno municipal, que informó tanto a la oposición como a los trabajadores del Pazo después de anunciar la medida en los medios de comunicación, una "falta de respeto", sobre todo, hacia los trabajadores. Además, criticó que se apela a la eficiencia y el ahorro de costes, pero reprocha al Gobierno municipal que no aportó ningún informe que lo avale.
Además, el Pleno aprobó la modificación de la ordenanza que regula los furanchos en el municipio y permitirá ampliar su período de apertura de forma excepcional hasta el 31 de julio. Con esta modificación, se atiende una solicitud realizada por la Federación de Furancheiros, Loureiros y Viticultores.
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