Confiesa que intentó matar a un hombre de varios navajazos y acepta cinco años de cárcel
Por Natalia Puga & Mónica Patxot
Un arousano confesó este martes en la Audiencia Provincial de Pontevedra que en abril de 2016 intentó acabar con la vida de otro hombre clavándole dos veces una navaja en el costado y por este delito aceptó cumplir una pena de cinco años de prisión.
El hombre, Johnny A.B.H., se sentó en el banquillo de los acusados de la Sección Segunda de la Audiencia este martes y reconoció los hechos, por los que la Fiscalía pedía inicialmente que fuese condenado a siete años y seis meses de prisión, pero finalmente los redujo a cinco al aplicarle la circunstancia atenuante de la responsabilidad criminal de embriaguez.
La fiscal del caso, Carmen Novo, modificó sus conclusiones iniciales para añadir que, en el momento de los hechos, el acusado había consumido alcohol y tenía un leve estado de embriaguez, de modo que redujo la petición de condena por un delito de homicidio en grado de tentativa.
Tras la confesión del procesado, tanto la acusación particular como su defensa estuvieron de acuerdo con la Fiscalía y el hombre aceptó la pena, de modo que el presidente del tribunal, Xosé Xoán Barreiro, ya dictó sentencia condenatoria. El fallo judicial ya es firme, pues ninguna de las partes va a recurrirlo.
Los hechos por los que fue condenado ocurrieron sobre las 11.10 horas del 3 de abril de 2016, cuando el procesado estaba en situación administrativa irregular en España. Caminaba por la plaza de la Independencia en Vilagarcía de Arousa con amigo, se cruzó con su víctima, que también iba con un amigo, y se produjo una discusión entre todos ellos.
En un momento dado, se abalanzó sobre uno de los implicados en la pelea y, con el propósito de acabar con su vida, le asestó dos puñaladas en el costado con una navaja que llevaba. No le clavó una tercera porque se lo impidió uno de los implicados, que se llevó al herido del lugar. El individuo atacado sufrió dos heridas de arma blanca en ambos costados que le provocaron fracturas costales.
El fiscal también reclama que el acusado indemnice a su víctima con 1.290 euros por las lesiones, 1.000 euros por la secuela y 3.000 euros por los daños morales sufridos. Al Servizo Galego de Saúde de la Xunta de Galicia le pagará los 3.967,66 euros por los gastos generados por las asistencias sanitarias.