Pablo Ferrández, un violonchelista de 24 años, protagonista del concierto de la Filharmonía de Galicia en Pontevedra
Por Diego Torrado
La Real Filharmonía de Galicia volvió a triunfar en Pontevedra. El auditorio de la sede de Afundación en la ciudad acogió este jueves un nuevo concierto de esta formación que, en esta ocasión, ha estado dirigida por su director honorífico Antonio Ros-Marbà.
Cientos de pontevedreses gozaron con esta actuación, que se enmarcaba dentro del convenio firmado por Afundación, la Sociedad Filarmónica de Pontevedra y el consorcio de la ciudad de Santiago.
El conjunto sinfónico compostelano ofreció en Pontevedra dos obras del compositor checo Antonin Dvorák: el concierto para violonchelo y orquesta en Sí menor, opus 104; y la Sinfonía nº 7 en Re menor, opus 70.
Uno de los atractivos especiales de esta actuación fue que en el concierto para violonchelo actuó como solista Pablo Ferrández. Nacido en Madrid en 1991, este joven intérprete está considerado como uno de los violonchelistas más sobresalientes del actual panorama musical internacional.
Como curiosidad, Pablo Ferrández tocó un violonchelo Stradivarius Lord Aylesford, que data de 1969, gracias a la Nipon Music Foundation.