Luis López, presidente de la Deputación: "Para tomar una decisión, me pongo la chaqueta de alcalde"
Por Oskar Viéitez & Mónica Patxot
Luis López Diéguez (Rodeiro, 1978), conocido por el apodo familiar de Lugués, es desde hace 127 días presidente de la Deputación de Pontevedra. Este viernes acaba de sacar adelante el presupuesto para el próximo ejercicio, uno de los instrumentos básicos en los que se materializará su acción de gobierno.
En su despacho del Pazo Provincial recibe a PontevedraViva.
¿Por qué se metió en política?
En la etapa de universidad, yo tenía un hermano que era concejal, era como cuando con los futbolistas el que llega el más alto siempre hay quien dice: "no, el bueno era el hermano". Pasaba con el jugador del Pontevedra CF Canabal, se decía "no, el bueno era el hermano". Y en esto también, el bueno era mi hermano.
En el 95-99 mi hermano era concejal y yo tenía inquietudes y quedaba con otro que era concejal en Santiago y yo era superpropositivo, supercañero y en el año 2003 me dijo "oye, mira, Lugués, tú que eras el que tanto desde fuera proponías, decías que era muy fácil hacer… ¿por qué no te vienes para dentro y participas en las listas?" y adopté esa decisión de involucrarme.
Además, yo ahí ya estaba en una situación en la que podía dedicarle tiempo. Porque si yo tomo una decisión es para dedicarme en cuerpo y alma. Tenía 25 años. Luego, con 27-28, se había dado la circunstancia de que el alcalde que estaba, por una baja superpotente, había desaparecido de la Alcaldía y yo estaba ya llevando el Concello de aquella. Venía de Santiago a Rodeiro todos los días.
¿Y por qué en el Partido Popular?
Eso sí que lo tenía claro. En la Facultad de Derecho estaban los CAF y te venía Ana Pontón como un martillo pilón. Mi entorno de amigos era todo izquierda, todavía hoy. Pero era un tema de principios, yo me sentía superidentificado con el PP. Y también la tradición familiar tiene un peso.
Pasó diez años de alcalde en Rodeiro y luego fue el delegado de la Xunta en Pontevedra. ¿Cómo fueron esas experiencias?
No soy una persona muy de cambios, pero el hecho de tener que afrontar proyectos nuevos en un corto espacio de tiempo es enriquecedor. Son cosas diferentes y al final tienes una hipermotivación. Cuando tienes que empezar de cero, a mí me cuesta dar el paso. A lo mejor si ya estás instalado en modo cómodo acabas yéndote a situaciones de desgana, que yo nunca las tuve, ni de alcalde, pero soy consciente de que puede ocurrir.
Se declara “municipalista convencido” y ahora es alcalde de alcaldes ¿en qué lo van a notar en los concellos de la provincia?
Cuando me pongo aquí en este despacho o en cualquier espacio para tomar una decisión, me pongo la chaqueta de alcalde. Pienso, si yo fuese el alcalde, ¿qué haría? ¿Qué me gustaría que me reportase la Deputación? Eso es algo que no solo se traduce en mí, que lo llevo dentro, sino también en el equipo todo que conformamos.
Somos 14 diputados, siete de ellos alcaldes, otros con experiencia municipal o en otras administraciones… esa es una de las múltiples ventajas de este equipo de gobierno.
Al mismo tiempo, es usted el presidente provincial del PP. ¿Le condiciona esa responsabilidad a la hora de gobernar la Deputación?
No. Yo sé distinguir y creo que lo demuestro. De hecho, cuando fue el nombramiento de presidente de la Deputación hubo felicitaciones de mucha gente de otros partidos. Eso es por algo. Yo lo estoy demostrando, para mí los alcaldes y alcaldesas son todos iguales, no distingo de un color o de otro.
Este viernes se aprobaron los Presupuestos de la Deputación para el próximo año 2024. ¿Cuáles serán los ejes de la acción del gobierno de Luis López?
Es una fecha importante la aprobación de unos presupuestos que llevan el sello propio de este gobierno y que van a entrar en vigor a 1 de enero. Lo primero que se refleja es lo totalmente municipalistas que son estos presupuestos, donde uno de cada tres euros, 66 millones de euros concretamente, van a parar directamente a los concellos. Y eso de entrada, porque luego, según se vaya desarrollando el año 24, con la incorporación de remanentes, siempre acaban yendo a parar más fondos a los ayuntamientos.
Luego Deporte, vamos a incrementar un 19%. A mayores, el primer plan que diseñamos fue el de infraestructuras deportivas con 4 millones de euros. Un impulso que le vamos a dar a la Cultura, con un incremento de un 20%. En Turismo tenemos una subida real de un 1,1% y digo subida real porque había dos programas que llegaban a su fin que estaban con fondos europeos y eso te da un bajón en la partida, pero fuimos capaces de inyectar dinero.
Hay una nueva área importante para nosotros que es la de Juventud y Reto demográfico dotada con 1,2 millones de euros. En definitiva, esos son los ámbitos sobre los que va a pilotar nuestro proyecto, aunque vamos a tocar absolutamente todo.
En el gobierno anterior había una serie de acciones muy significativas como el feminismo, el plan de compostaje, las políticas de movilidad, la memoria histórica. ¿Habrá continuidad en esas políticas?
No descartamos nada, es un tema que muchas veces es la interpretación que le quieran dar en la oposición que, lógicamente, hace su trabajo. Pero no renunciamos a nada.
Sí hay cuestiones a las que le damos un enfoque diferente. Consignar mucho presupuesto no es sinónimo ni de éxito ni de apoyo decidido por eso. Por ejemplo, en el Plan Revitaliza durante estos ocho años se consignaron casi 20 millones de euros y la ejecución fue de 10 millones. Hubo años en los que se ejecutó el 39% nada más y la media de ejecución fue del 44%. Por lo tanto, de nada vale decir tengo una millonada para X si luego no ejecuto.
En este documento económico sí es cierto que puedes quitar esas conclusiones, pero eso no conlleva que descartes inversiones en medio ambiente, en igualdad…
Sobre la Igualdad insiste usted que no quiere hacer de ella una materia de confrontación, ¿cree que ocurría eso en el anterior gobierno de Carmela Silva?
Sí, sí. Y no era solo una materia de confrontación, sino que era una plataforma de promoción política de la presidenta. La Igualdad es transversal, no se puede reducir al ámbito de la partida concreta que hay en el presupuesto y no puede servir como herramienta de confrontación. Tiene que haber unidad. Y no puede ser el trampolín de promoción de ningún político. Aquí hay que ser serios.
En estos últimos años se dejaron encarriladas una serie de gestiones con la Xunta como las transferencias del Pazo de Lourizán, la Escuela de Enfermería, la de Cantería. ¿Habrá más? (Príncipe Felipe, Finca de Mouriscade, Estación Fitopatológica de Areeiro).
Nosotros no somos revisionistas. Si algo estaba bien hecho, lo vamos a seguir manteniendo. Lógicamente, hay cosas que son susceptibles de mejora y vamos a trabajar en eso; y luego también tenemos nuestro propio proyecto.
En relación con lo de las transferencias acabamos de firmar un protocolo con la Consellería de Educación para los centros educativos que hay en Príncipe Felipe. Por lo tanto, estamos trabajando y avanzando en ello, siempre pensando en los beneficios que puedan obtener todos y cada uno de los que están en ese centro.
En el tema de los coles, lo que se refiere a temas de sueldo, titularidad de los edificios que pase a la Xunta que a fin de cuentas es quien está haciendo la gestión, pues también parece de lo más idóneo. Si hay instalaciones o servicios que es mejor que sean competencia de una administración que de otra, pues, llegado el momento, lo hablaremos.
Hablemos de la capital. ¿Cómo va a ser la relación de la Deputación con el Concello de Pontevedra?
La ciudad de Pontevedra no se entiende sin la Deputación, como institución y por su significado. Lo que es la relación con el Concello, el alcalde de Pontevedra fue uno de los primeros que me pidió una reunión y ya tuve ese encuentro desde la más absoluta colaboración y lealtad institucional; y eso es lo que tiene que ser y lo que se nos pide. Es decir, colores políticos a un lado y sentarnos a trabajar por proyectos en común.
Y se da la circunstancia de que dentro del equipo está el vicepresidente Rafa Domínguez, que es uno de los principales defensores que tiene Pontevedra en esta casa y que es de hacer un trabajo en positivo. Esto va a garantizar que salgan proyectos importantes para la ciudad de la mano de Concello y Deputación.
Para el próximo año habrá elecciones autonómicas. Supongo que aunque conozca la fecha no la va a desvelar.
Si la supiese…
¿Cómo van a condicionar su trabajo en la Deputación las responsabilidades que tiene en el PP provincial de cara a esta importante cita?
Por experiencia de lo que hice como delegado territorial de la Xunta, que combiné la Delegación con la Presidencia del partido, el ritmo y el trabajo de una administración, en este caso la Deputación, no se puede ver condicionado por un proceso electoral. Nosotros estamos aquí elegidos para trabajar, para dar soluciones y sacar proyectos; y que no se vean nunca condicionados por ningún proceso electoral de la índole que sea.
¿Qué ocurre? Pues que en vez de dormir siete horas a lo mejor tienes que dormir cuatro.
No va a interferir para nada, sea cuando sea la convocatoria de las elecciones autonómicas, que, sabe Dios, no tengo ni idea de cuando serán.
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