La escasez de días de frío durante el invierno reducirá la cosecha de albariño
Por Oskar Viéitez
El responsable de la Estación Fitopatológica del Areeiro, Pedro Mansilla, alertó que el viñedo de la provincia de Pontevedra se encuentra en estos momentos en un "período de máximo riesgo".
Mansilla, que compareció junto con el presidente de la Deputación, Rafael Louzán, en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno, informó que el ataque de mildiu que ya desde principios de mayo afectó a numerosas parcelas, está en estos momentos "muy bien controlado", pero eso no puede llevar a bajar a la guardia dado que "estamos en el período de máximo riesgo para el viñedo porque ya está en floración y nos jugamos la cosecha de todo el año".
Louzán se hizo eco de la preocupación que le están trasladando a los productores de Rías Baixas por la posible reducción de la producción este año. En este sentido, Mansilla aseguró que no existe una "razón patológica", pero sí puede estar relacionada con las escasas horas de frío del invierno.
Puede calcularse que el albariño precisaría unas 700 horas de frío
"Las horas de frío son fundamentales para poder tener una buena cosecha, para que se diferencien las yemas y haya fruto", aseguró el responsable de la Estación Fitopatológica. De hecho, puede calcularse que el albariño precisaría unas 700 horas de frío "y en ninguna parte de la provincia se llegó a ese punto este invierno".
Pese a todo, habrá que aguardar aún para valorar si realmente existe esa reducción de la producción y en cuanto se cifra la misma, más teniendo en cuenta que se está comparando con la vendimia de 2013, que había sido extraordinariamente positiva.
Tanto Louzán como Mansilla indicaron que, en lo que respecta a la fitopatología, habrá que aguardar a finales del mes de junio para comprobar la afectación total del mildiu, dado que será en ese momento cuando se pueda considerar "superado el período de máximo riesgo".
En la visita que durante este miércoles están realizando los técnicos de Areeiro a las parcelas de la comarca de O Salnés pudieron comprobar que, aunque el uso correcto de tratamientos consiguió frenar el avance de la enfermedad, en las parcelas testigo que son aquellas que no se tratan, se detectan ya nuevos brotes de infección, por lo que es preciso "extremar las precauciones y estar muy atentos" ante la posible reaparición del mildiu, especialmente teniendo en cuenta que las predicciones meteorológicas hablan de lluvias abundantes a partir del jueves con bajadas de temperatura nocturnas, lo que favorece el desarrollo de la enfermedad.
AVISOS SEMANALES
En este sentido, Rafael Louzán destacó el papel que la Deputación de Pontevedra, a través de Areeiro, está realizando para ayudar a todos los viticultores a controlar las diferentes plagas y enfermedades que afectan al viñedo y a otros frutales y recordó que, además de los avisos y recomendaciones que ya reciben de forma directa todos los que forman parte del proyecto Viñas Atlánticas, cualquier persona interesada puede obtener información detallada de las recomendaciones para el viñedo todas las semanas a través de la página de Areeiro.
Louzán recordó que este é un momento crucial no sector vitivinícola y las bruscas variacións meteorolóxicas que se están dando en estos días y durante toda la primavera pueden favorecer la proliferación del mildiu que, tal y como indicó Mansilla, es una enfermedad para la cual desde Areeiro ya se preveía "un ano complicado" debido, precisamente, a las oscilaciones térmicas y meteorológicas.
Por eso, es recomendable un seguimiento exhaustivo de las parcelas y estar atento a los avisos que semanalmente emite Areeiro sobre el estado de las viñas y las recomendaciones para su tratamiento, que pueden permitir atajar el problema.
En lo que respecta a las demás enfermedades, como el oidio, las acariosis o la polilla, Mansilla indicó que este año "están afectando muy poco" al viñedo.
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