El Pleno de la Junta del Colegio Oficial de Médicos de la provincia de Pontevedra ha acordado, por unanimidad, romper todo tipo de relación con la Consellería de Sanidade de la Xunta de Galicia hasta que cambie el equipo que actualmente dirige el conselleiro Julio García Comesaña.
Según indica esta institución, a través de un comunicado, el Colegio de Médicos ha intentado en múltiples ocasiones encontrar una interlocución adecuada con la Consellería, "teniendo como respuesta la ineficacia, la falta de seriedad, planes que no se cumplen y, en ocasiones, respuestas que parecen más ocurrencias que soluciones reales". Frente a esta situación, desde el Colegio observan un deterioro en la asistencia sanitaria tanto para los profesionales como para los pacientes. "La Consellería está permanentemente instalada en una realidad falsa y fantasiosa", alegan.
Consideran que la Consellería ofrece una "total ineficacia" para solucionar o paliar "los graves problemas de la sanidad en nuestra provincia que abarcan todas las esferas, desde la medicina hospitalaria hasta la, actualmente más graves, situación de la Atención Primaria".
Señalan que a la situación actual se ha llegado por las "continuas deficiencias acumuladas durante años por un sistema sanitario gallego que tiene transferidas la totalidad de sus competencias en salud desde hace más de 30 años". Y añaden "por más que busquen otros culpables, entre ellos, los médicos -los cuales sufren agresiones personales y mediáticas continuamente- son ellos los responsables de esta situación de gravísimo deterioro que no cesa de aumentar".
Afirman que la Consellería incumple sus propias propuestas y se refieren al documento pactado con el Consello Galego de Colexios de Médicos "Por una atención primaria vertebradora del sistema de salud", de noviembre de 2019, realizado a propuesta de la Consellería para acometer mejoras y soluciones "que nunca se han llevado a cabo".
Desde el Colegio que preside Isidro Lago también se expone que existe una "evidente discrepancia entre los datos que aportan desde la Consellería y los datos de la realidad vivida, día a día, por profesionales y pacientes". Afirman que "ya tienen normalizadas situaciones como la falta de médicos en los centros sanitarios de urgencias extrahospitalarios, delegando en otros estamentos (como farmacéuticos o enfermería) funciones propias de los médicos en las urgencias y en la asistencia diaria en los centros de salud, donde los pacientes siguen encontrando cada vez más dificultades en el acceso a los mismos". Afirman que no pueden entender la Atención Primaria sin médicos y con listas de espera como las actuales, temas admitidos a trámite judicial ante el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia.
Como punto más grave, añaden, es que la Consellería avale la prioridad en la atención de los pacientes que acuden a los centros de salud en personal no sanitario "disfrazando este triaje en sistemas de “ordenación de la demanda” que no tiene validez clínica, ni jurídica. Esto supone, a nuestro juicio, un peligro no solo para la intimidad sino también, y mucho más grave, para la propia seguridad de los pacientes". Aseguran que desde su implantación, la "ordenación de la demanda" es peor.
"Formar más médicos para que se marchen del sistema público es malgastar dinero público"
Insisten también en que, en la actualidad, no existen las condiciones laborales apropiadas que oferta el SERGAS a médicos con la Especialidad de Medicina Familiar y Comunitaria, ni Pediatras de Atención Primaria para cubrir las vacantes. Argumentan que la oferta es tan deficiente que ni creando nuevas categorías de médicos para este fin ofertando plazas fijas por un sistema de méritos (sin oposición), las plazas no se cubren. "Los médicos no aceptan sus deficientes condiciones de trabajo. Más de 400 médicos emigran todos los años. Más de 200 plazas de Medicina Familiar y Comunitaria quedaron desiertas en el último MIR. Formar a un médico le cuesta a la sociedad más de 300.000 euros y, la mayoría, se marchan a trabajar a otras autonomías, países o a la medicina privada", concluyen desde el Colegio de Médicos, que sentencian "formar más médicos para que se marchen del sistema público es malgastar dinero público".
"La falta de médicos surge del trato desconsiderado y del maltrato al que son sometidos los profesionales, a los que se llega a culpabilizar de la situación actual", continúan en el comunicado indicando que "existe un rechazo cada vez mayor de los médicos MIR a dedicarse a la Atención Primaria", decisión que relacionan con la frustración de los médicos experimentados "a los que se les impide realizar su trabajo en condiciones dignas por la saturación de pacientes en las agendas y la carga burocrática a la que se enfrentan en su día a día".
En un último punto denuncian las deficiencias en la formación MIR. Acusan a la Consellería de Sanidade de no regular legalmente "a través de una orden autonómica, las competencias, derechos, obligaciones e incentivaciones de los tutores de los médicos residentes, algo imprescindible para este Colegio. No se pueden pedir mas plazas de MIR y no poder formarlos".
Reclaman una dotación económica adecuada para solventar las "enormes deficiencias actuales", dotación que "no aparecen ni en los presupuestos actuales ni en los del próximo año". Piden una comisión de seguimiento independiente y recuerdan que no se puede continuar con la política de disminución de la inversión en Atención Primaria en los últimos años, causa fundamental que "ha impedido dar una atención de calidad a nuestros pacientes", advierten.
El Pleno de la Junta del Colegio de Médicos de Pontevedra afirma que, tras suspender las negociaciones con la Consellería de Sanidade, recurrirá a otras instancias como las judiciales para "garantizar la salud de nuestros pacientes y las condiciones profesionales adecuadas a nuestros compañeros".
Recuerdan, por último, que el Consello Galego de Colexios de Médicos, que preside actualmente el Colegio de Médicos de Pontevedra, tiene pendiente una reunión con Alfonso Rueda, presidente de la Xunta de Galicia, para tratar todos estos temas y "como siempre, estaremos dispuestos a retomar todos los mecanismos de comunicación a nuestro alcance en aras del bien común", frase con la que finalizan el comunicado.