La familia de Sonia Iglesias Eirín ha iniciado los trámites para que un juzgado declare oficialmente muerta a la mujer, desaparecida el 18 de agosto de 2010 en el centro de Pontevedra cuando tenía 37 años de edad y un hijo de 9.
Los trámites los puso en marcha hace dos semanas el hijo de la desaparecida, Alejandro Araújo Iglesias, de 20 años de edad y que desde el pasado septiembre ya es huérfano de padre, al fallecer Julio Araújo, ex pareja de Sonia Iglesias y, durante años, único sospechoso de su ausencia.
La noticia fue adelantada este fin de semana por Serafín Alonso en Diario de Pontevedra. Este lunes, fuentes judiciales consultadas por PontevedraViva han confirmado que un abogado presentó la solicitud de declaración de fallecimiento de Sonia a instancias de su hijo y el Juzgado de Primera Instancia número 5 de Pontevedra inició el expediente para tramitarla.
El expediente se inicia una vez que se cumple el principal requisito para la declaración de fallecimiento de una persona desaparecida, que hayan pasado 10 años de su ausencia. Esa fecha se cumplió el pasado mes de agosto.
A la hora de formalizar la solicitud, se aporta como prueba fundamental un auto judicial por el que se confirma que se archiva la causa por la desaparición de Sonia Iglesias, al entender que con ese documento ya se establece una prueba de que su ausencia lleva en investigación 10 años y no han vuelto a tenerse noticias de la joven pontevedresa.
El trámite se inicia ahora al cumplirse los 10 años y porque la familia de Sonia necesita esa declaración oficial de ausencia para tramitar toda una serie de procedimientos administrativos como la herencia de la mujer o la posible solicitud de orfandad de su hijo.
Así, Alejandro Araújo ya es huérfano de padre y, con esta declaración, pasaría a serlo también de madre, pudiendo realizar todos los trámites necesarios. Según las fuentes consultadas por este periódico, tiene, por lo tanto, finalidades casi burocrátias, para que su hijo puede realizar una vida normal en varios aspectos de su vida.
Sin esa declaración oficial de fallecimiento no podría heredar ni tampoco aclarar la propiedad de la casa en la que vivía con sus padres cuando desapareció su madre en el Campo da Torre de Pontevedra.
El siguiente paso para hacer oficial la declaración de fallecimiento será publicar en el Boletín Oficial del Estado el auto judicial por el que se abre el expediente pues en él se hace público que cualquier persona que tenga datos del paradero de Sonia debe aportarlas al juzgado.
A continuación, habrá una comparecencia de trámite en los juzgados pontevedreses, con la presencia de la persona solicitante, en este caso, su hijo, y el juzgado podrá decidir si confirma que está muerta o sigue con la condición de desaparecida.