El 30 de enero se celebra el día de la Paz, me gustaría que fuera una PAZ con mayúsculas pero desgraciadamente cada vez hay más conflictos a lo largo y ancho de este mundo en que nos ha tocado vivir.
Unas veces por culpa de algunos gobernantes que en vez de "limpiar" su casa se dedican a ir a la del vecino, aunque esté a miles de kilómetros de distancia y otras por los propios habitantes de los distintos países, el caso es que PAZ hay cada vez menos; las familias, los vecinos, los compañeros de trabajo y un largo etcétera siempre tienen alguna rencilla entre ellos.
En este día 30 de enero grandes y chicos manifiestan mediante una serie de actos la solidaridad para conseguir la PAZ en el mundo, una paz que no por deseada llega.
Sería importante que no hubiese un solo día en el año para acordarse de la PAZ mundial, que los 364 restantes hiciésemos lo posible por llevarnos bien con todos, que se empieza a nivel pequeño y se termina con la unión de muchos.
Recuerdo unas palabras de Mahatma Gandhi"si la gente se arregla todos los días el cabello ¿por qué no arregla también el corazón?".
Asistimos impotentes a continuos actos de violencia, jóvenes que mueren a manos de otros jóvenes, sin explicación alguna, niños que en las escuelas o en las calles maltratan a sus compañeros por simple diversión.
Debemos, con nuestro ejemplo, valorar lo bueno, fomentar la ayuda, respetar a los demás.
Diría Milton Rokeach: "la honradez, la educación y la responsabilidad, marcan el camino a seguir" todo ello da sentido a la vida, facilita la relación con los demás y nos proporciona una vida equilibrada de solidaridad y PAZ.
¡Ojalá fuese así!.