En Pontevedra, políticamente hablando, este año 2015 será recordado por el histórico cambio que ha experimentado la Deputación.
Gobernada por el Partido Popular desde 1983 -y por Rafael Louzán los últimos doce años-, las elecciones locales del pasado mes de mayo dejaron un nuevo escenario político y el PSdeG-PSOE, apoyado por el BNG, logró situar a uno de los suyos al frente de la institución provincial.
Y fue una mujer, la viguesa Carmela Silva, la elegida para romper también otra barrera. Ninguna mujer había presidido antes la diputación pontevedresa. Tras unas largas negociaciones con los nacionalistas, fue investida como presidenta en un Pleno que se celebró el 17 de julio. "The times they are a-changing", proclamó citando a Bob Dylan en referencia a este cambio histórico.
PSdeG-PSOE y BNG, mediante este pacto de gobierno, decidieron repartirse las competencias y César Mosquera, uno de los hombres fuertes de Miguel Anxo Fernández Lores en Pontevedra, se convirtió en vicepresidente.
Desde entonces, unos y otros repiten cada vez que pueden que, desde su llegada, se ha producido "un cambio radical" en la gestión de la institución pontevedresa "abriendo ventanas y puertas".
Por su parte, Rafael Louzán tan solo permaneció un par de meses como diputado provincial. Tras perder la Deputación, renunció a su acta para centrarse en una actividad que también estrenó este año, la de presidente de la Federación Gallega de Fútbol.