Paso atrás en la reapertura del Complejo Deportivo Rías do Sur de Ponte Muíños.
Sólo unos días después de conocerse el auto judicial que ordenaba la reapertura inmediata de la piscina olímpica pontevedresa para el uso de los deportistas federados y también para los socios fundadores de la Fundación Rías do Sur, la titular del Juzgado de Primera Instancia número 3 de Pontevedra ha emitido un nuevo auto anulando la decisión por un posible defecto de forma.
El problema radica en que la empresa Supera (o su matriz Sidecu), concesionaria de las instalaciones, defendía no haber sido notificada para acudir a la vista judicial en la que debían decidirse si se aceptaban las medidas cautelares solicitadas por la Fundación.
"Esto lo que conlleva es un pequeño retraso, no es mucho porque nos han citado para el día 8 de julio, pero mientras tanto no podemos hacer nada", explica el presidente de la Fundación, Héctor Vilariño, señalando la nueva fecha fijada por la jueza para una nueva vista, de la que se espera salga de nuevo un auto que confirme la obligación de reabrir la piscina mientras se prolonga se prolongue el conflicto abierto con Supera, que decidió cerrar el complejo deportivo al completo el pasado 1 de abril justificándose en los costes energéticos que le suponía su mantenimiento.
En todo caso, en una comunicación enviada a sus socios, la Fundación Rías do Sur pone en duda la falta de notificación a Supera asegurando que "hasta en tres ocasiones nuestros servicios jurídicos solicitaron del Juzgado la confirmación de la correcta citación de la entidad Sidecu, S.A., y en tres ocasiones -dos de ellas antes de celebrarse la primera comparecencia- se nos informó del resultado positivo de dicho trámite".
Pese al varapalo "seguimos trabajando con miras a lograr una solución inmediata para que los clubes puedan paliar la precaria situación que están viviendo", lo que esperan conseguir en un corto periodo de tiempo una vez se celebre la vista el próximo día 8 de julio.