Ana Castro, aparejadora de la Fundación Catedral de Santiago, es la ganadora del Primer Premio a Actuaciones en Ciudades Patrimonio de la Humanidad que concede el Consejo General de la Arquitectura Técnica de España (CGATE).
Esta arquitecta técnica nacida en Cuntis, vecina de Poio, y colegiada del Colegio Oficial de la Arquitectura Técnica de Pontevedra recogerá este sábado, 14 de mayo, en Toledo el galardón que dedica "a todos los que participan y participaron en la restauración de la Catedral de Santiago". "Este premio es el reconocimiento a un trabajo en equipo de muchos años, de mucha gente, de todo un grupo de profesionales que ha puesto mucha ilusión y dedicación, mucho talento y esfuerzo en la restauración de la Catedral de Santiago de Compostela", afirma.
Ana Castro destaca también que este premio permite dar visibilidad a la profesión de la arquitectura técnica algo que "hace mucha falta" ya que "en muchas ocasiones es un trabajo que pasa desapercibido". Lamenta que la dirección de ejecución de obra "casi siempre se diluya con los técnicos de la contratista principal, subcontrata, etcétera... Quedamos en tierra de nadie".
Ana Castro comenzó a trabajar en la Catedral compostelana en el año 2013 "es un trabajo complejo y muy delicado, en el que cada día adquieres nuevos conocimientos; es un trabajo especial, es único, donde estás rodeada de expertos que aportan diferentes puntos de vista y se trabaja en equipo, por donde pasa todo tipo de profesionales que ponen lo mejor de cada profesión, donde hay un intercambio de opiniones para hacer un trabajo de excelencia en nuestra profesión y para nuestra profesión".
Su labor diaria consiste en supervisar todo el trabajo de todas las subcontratas; de todas las constructoras que trabajan para la Fundación Catedral de Santiago de Compostela y también desarrolla la gestión económica, revisa la ejecución de los diferentes proyectos, de los planes de trabajo, de las certificaciones.... En pocas palabras, es la persona que está al pie del cañón. A su juicio, "es un trabajo inmenso" ya que los aparejadores son "un eslabón fundamental en la cadena que forman todos los profesionales que participan en este trabajo".
Ana Castro, en estos momentos de reconocimiento, tiene un especial recuerdo para Adega Da Costa, otra arquitecta técnica de Vigo, "que estuvo conmigo desde el principio colaborando, haciendo labores de ejecución de obra y se encargó también de la seguridad".
Actualmente Ana Castro está preparando un nuevo informe sobre la rehabilitación de otros espacios del templo compostelano, "hay que continuar restaurando la Catedral de Santiago de Compostela, porque necesita continuamente la mano de profesionales". "La idea es seguir conservando y poniendo en valor las zonas que todavía deben ser restauradas en la Catedral de Santiago de Compostela", añade.