Miles de personas soportaron una jornada calurosa para acudir hasta la parroquia de San Mamede de Amil, en Moraña. Como manda la tradición, este primer domingo después del 8 de septiembre se celebraba el día grande de esta popular romería.
Desde las 06.00 horas se oficiaban novenas cada sesenta minutos. Y a las 13.00 horas, los fieles asistían a la misa solemne, muchos de ellos dejando dinero en la figura de la Virgen, para después dar paso a la habitual procesión por el campo de santuario en homenaje a Nuestra Señora de los Milagros de Amil.
La jornada se desarrolló con los habituales puestos de venta de productos típicos y gastronómicos. A las 21.00 horas, la Banda de Música de Vilanova será la protagonista de un concierto a los asistentes. Muchos de ellos volvieron a peregrinar durante la noche desde distintos puntos de la provincia hasta llegar a la capilla y asistir a las misas de la madrugada.
Los fieles volvieron a mojarse y a beber en la fuente de agua santa al pie de la escalinata de los cien escalones que conduce a la iglesia. Según la leyenda, esta fuente fue construída por un anciano en el siglo XVII. El hombre, impedido para ir a buscar agua para regar la huerta rogó ayuda a la Virgen, que creó un manantial junto a la casa de este vecino. Este surtidor de agua es conocido como la Fonte de Rozavella.