La plaza de A Pedreira fue un año más el lugar elegido por la asociación cultural Trépia para celebrar su tradicional magosto, una celebración que, como no podía ser de otro modo, incluyó mucha música, baile y fiesta rachada.
Este magosto, ya convertido en un clásico del otoño pontevedrés, ofreció sus habituales ingredientes: castañada, tiznada y una fiesta.
En la parte musical fueron actuando miembros de la asociación cultural, que hicieron bailar al público que se acercó a celebrar la llegada del otoño con ellos.