No tienen escobas voladoras pero pero sí muchas ganas de pasarlo bien.
A simple vista pueden parecer un grupo de deportistas persiguiendo pelotas en un campo que en lugar de porterías cuenta con tres aros, y además corren con un palo entre las piernas, pero lo hacen para asemejarse al deporte original, ése creado por J.K. Rowling en la popular saga de Harry Potter.
Es el quidditch, o la versión no mágica (muggle) de este deporte, adapatado ahora a la vida real y que empieza a extenderse por todo el estado, y también por Galicia.
El campo de fútbol de la calle Oliveira, en Poio, ha sido escenario este sábado del primer Torneo do Noroeste de Quidditch.
Allí se reunieron cinco equipos de diferentes puntos de la geografía gallega, compuestos por seguidores de la saga literaria: Dementores, Pontevedra Quidditch Club, Lion's Blood, Lechuzas Rabiosas y Gigantes de Arousa.
Quien sabe si estamos ante el inicio de todo un fenómeno deportivo y social, pero de momento se trata simplemente de pasar un buen rato al que invitan a unirse para próximas ediciones.